En la noche del viernes se destrabó el conflicto gremial que había puesto en jaque al tránsito de barcos graneleros y de contenedores en los puertos del Gran Rosario, Bahía Blanca y Necochea.
“Luego de largas y extensas reuniones en el ámbito del Ministerio de Trabajo y producto del Plan de lucha en duchos buques, hemos arribado a un acuerdo con la Cámara Armadora de Remolque”, informaron los representantes de los trabajadores.
Previamente a las 21 horas de este viernes, momento en el que los trabajadores volvieron a las órdenes de las empresas para cumplir sus funciones con normalidad, el clima entre los empresarios del rubro era de gran preocupación.
Por esas horas se expandía la preocupación entre los empresarios de la exportación agropecuaria: el ingreso y la salida de barcos graneleros a través de los puertos de la Hidrovía, Necochea y Bahía Blanca estaban paralizados.
El reclamo de los trabajadores enrolados en la Federación Sindical Marítima y Fluvial (Fesimaf), agrupó a las empresas de remolcadores e impidió el ingreso y egreso de buques en todos aquellos puertos a lo largo del país que dependen de los remolcadores para desarrollar la actividad.
“Nuevamente las Terminales Portuarias se ven afectadas por conflictos gremiales en los que no tiene relación directa pero que imposibilitan la normal operatoria. El 80% del comercio exterior está interrumpido por la medida que ya lleva dos días de duración”, afirmaron desde la Cámara de Puertos Privados a través de un comunicado.
Según relevaron, esto afectó a todo tipo de buques que transportan diferentes mercaderías como cereales, hidrocarburos, aceite vegetal, fertilizantes, automóviles, contenedores.
Además, alertaron que una de las consecuencias podía ser que los buques omitan los puertos de la zona centro del país y prioricen la descarga en Montevideo, Uruguay, o en Río Grande, en Brasil.
Fuente: Infocampo