La obra del gasoducto en Claraz, ubicada en el camino La Numancia, a 2000 metros del casco urbano de la localidad, ya está en su tramo final según lo expresado por el delegado José García.
Tal es así que, para ponerla en funcionamiento, solo falta la última prueba de hermeticidad y resistencia, tanto de la red cómo de las distintas partes de la planta reguladora, donde se corrobora que no hay fugas en las uniones, según se informó desde el municipio.
En este aspecto, se indicó que, de marchar todo según los tiempos previstos, en marzo ya podría estar el gas habilitado para terminar de dar respuesta así a una demanda de hace años por parte de los vecinos de la localidad, como así también será de provecho para la unidad sanitaria y los establecimientos educativos que cumplen un rol social fuerte en la comunidad.