Independiente de San Cayetano fue torazo en un rodeo ajeno.

Todo estaba a pedir de Kimberley de Mar del Plata

La cancha, el marco de gente y encima un inicio del partido con un penal de entrada que pudo abrir el partido y que Tomás Casas le detuvo a Zárate. Otra ocasión desde los doce pasos en el arranque del complemento que Tomás Casas le desvió al ingresado Barreiro. Después de esa acción, jugó más de media hora con un hombre más que su rival (10 contra 9). 

Todo eso no importó, porque Independiente fue templanza, trasladó la bronca contenida en el partido a tranquilidad para ejecutar con maestría los cinco disparos y Tomás Casas, el gran héroe “chimango”, hizo lo que tenía que hacer, atajó uno (el de Felipe Zabala) y sacó la diferencia necesaria para darle el pasaje a su equipo a la final por el ascenso. 

En el inició del partido Independiente salió a la cancha tensionado, se habían quejado en la semana por el arbitraje de Bruno Amiconi en la ida y Nicolás Salinas los terminó de enardecer cuando a los 5′ sancionó penal en la primera pelota que llegó al área visitante por un supuesto agarrón de Bacigalupe a Martínez que el árbitro, convencido, cobró de manera instantanea ante la mirada sorpresiva y risueña de los de blanco. Sin embargo, Tomás Casas empezó a demostrar que iba a tener una tarde de ensueño y le dio tranquilidad a su equipo atajando de buena manera el remate de Jonathan Zárate. Y mucho más, cuando un minuto más tarde, hizo una jugada perfecta, Brian Uribe recibió por izquierda, remató cruzado, la pelota dio en el palo y le quedó a Brandon Vargas que se tomó un segundo para controlar y mandar al fondo del arco. Dos palazos en un minuto para Kimberley que estuvo para ponerse arriba y se encontraba abajo. 

El resto de la etapa fue con un Kimberley apurado, sin claridad, apostando al juego aéreo de Diego Martínez y el desequilibrio de Ever Ullúa, el mejor del “dragón”. Pero apenas si tuvo algunas aproximaciones y un mano a mano que Casas le volvió a ganar a Zárate. De la visita, concentración y solidez para no dejar espacios y las charlas permanentes entre ellos de no protestar ante fallos de Salinas que dejaban algunas dudas. 

Obligado, Gustavo Noto técnico de Kimberley mandó en el descanso a Matías Barreiro y Ezequiel Goiburu para sumar más desequilibrio y gente por las bandas. El clima estaba enrarecido, había cruces adentro, estaba muy hablado afuera y el segundo penal de la tarde desencadenó el escándalo.

El centro llegó desde la izquierda, Martínez le ganó a Casas que se lo llevó puesto y, en el apuro por cobrar el penal, el árbitro no se dio cuenta que el cabezazo terminaba en el fondo del arco. Una decisión que lo terminó favoreciendo (por cómo terminó), enloqueció por completo a los de Independiente que se fueron encima de Salinas y de los jugadores de Kimberley. Silvio Vedda se agarró con Luengo, Páez con Santiago Vázquez y un suplente llegó corriendo desde donde hacía la entrada en calor y, de manera cobarde, golpeó al juvenil Agustín Vázquez que estaba mirando desde lejos. Ahí, otra vez los cruces entre jugadores, dos rojas por un lado (Vedda y Vázquez), una por el otro (Páez) y, en un clima muy caliente, Matías Barreiro a patear el penal que se había cobrado 15 minutos antes. Y en ese duelo psicológico, Tomás Casas volvió a prevalecer, fue sobre su izquierda y atajó el segundo penal de la tarde. ¡Increíble!.

El golpe para Kimberley se sintió, pero salió decidido a empatarlo. Y a los 31′, logró su cometido. En una pelota sucia, probó Goiburu de afuera, quedó un rebote para Barreiro, remató cruzado y en el segundo palo Martínez puso la cabeza para empujarla y dejar todo como al principio.

El pitazo final mostró más entero a Independiente, que logró su cometido, que a Kimberley, que sabía que dejó pasar una oportunidad clarísima. Sin embargo, con autoridad, casi todos ejecutaron con personalidad, con categoría y el único que no pudo anotar de los 10 fue Felipe Zabala, que chocó con Tomás Casas, sí, al que el destino le tenía preparada una tarde de gloria en el “José Alberto Valle”.

El resultado oficial dira que empataron 1 a 1 e Independiente de San Cayetano festejó 5-4 desde los doce pasos con efectividad perfecta y la consagración en la región Pampeana Sur del Torneo Regional Federal Amateur. Ahora lo espera Germinal de Rawson para lograr el ansiado ascenso.

Síntesis

Kimberley (1) (4): Emiliano Ferrer; Fermín Iriarte, Felipe Zabala, Agustín Vázquez y Leandro Páez; Jonathan Zárate, Damián Luengo, Nahuel Manzo y Luca Leiva; Ever Ullúa y Diego Martínez. DT: Gustavo Noto.

Cambios: ST 0′ Ezequiel Goiburu y Matías Barreiro por Manzo y Leiva, y 32′ Matias Cardellino por Martínez.

Independiente (San Cayetano) (1) (5): Tomás Casas; Gabriel Darroquy, Juan David Losada, Santos Bacigalupe y Jonathan Suhit; Brandon Vargas, Silvio Vedda, Hernán Paicil y Santiago Vázquez; Daniel Azurmendi y Braian Uribe. DT: Damián García.

Cambios: 8’ Leonardo Verón por Vargas, 33’ Matías Jalil por Uribe y 50′ Mauro Kroneberger por Suhit.

Goles: PT 8’ Vargas (I); ST 31’ Martínez (K)

Definición por penales: en Kimberley marcaron Vázquez, Ullúa, Barreiro y Luengo, Casas (I) le detuvo el remate a Zabala; en Independiente anotaron Azurmendi, Verón, Bacigalupe, Jalil y Paicil.

Árbitro: Nicolás Salinas, de Venado Tuerto.

Estadio: José Alberto Valle.