La Pulga obtuvo la máxima satisfacción de su carrera como futbolista y alcanzó el único hito que le faltaba a una carrera extraordinaria.
El astro argentino Lionel Messi levantó de una vez por todas la Copa del Mundo tras la consagración de la Selección en el Mundial de Qatar, luego de vencer por penales a Francia en la final, en una ceremonia que contó con cumbia a todo volumen en el estadio Lusail y con la presencia del “Kun” Sergio Agüero junto a otros de los jugadores que se perdieron el certamen.
Messi, después de mostrar un desempeño formidable a lo largo de todo el torneo que le valió el Balón de Oro de la cita mundialista, fue el último en subirse a la tarima donde los futbolistas recibieron la medalla y levantó la copa ante una estruendosa ovación de los hinchas presentes.
La “Pulga” celebró junto a su familia dentro de la cancha y se lo notó notablemente feliz después de alcanzar el único hito que le faltaba a su formidable carrera.
Además de todo el plantel argentino y el cuerpo técnico, en la premiación estuvieron Agüero, los delanteros Nicolás González y Joaquín Correa, que fueron desafectados por lesión tras haber formado parte de la lista inicial, y el mediocampista Giovani Lo Celso, que también se perdió la competencia por problemas musculares, entre otros.
Durante la entrega del trofeo, en suelo qatarí sonaron a todo volumen canciones de cumbia para representar a la Argentina, por lo que tanto los jugadores como los hinchas cantaron a todo pulmón en una jornada histórica del fútbol.