Se definió el cronograma de actividades educativas de 2025 para los estudiantes de todos los niveles de la enseñanza. La provincia de Buenos Aires informó que las clases para el ciclo lectivo del año próximo comenzaran el miércoles 5 de marzo, después de los feriados de Carnaval.
El cronograma diseñado por el Consejo General de Educación que funciona en la Dirección General de Escuelas provincial prevé el retorno a las aulas en todos los niveles para el mismo día. Jardines, primarias, secundarias, técnicas y de adultos reabrirán sus puertas de manera simultánea.
Son casi 18 mil establecimientos públicos y privados que se pondrán en movimiento después del receso de verano para reanudar las actividades académicas. Al frente de la gestión de enseñanza habrá medio millón de maestros y profesores públicos y de institutos particulares.
Ambas jurisdicciones coincidirán en el período de vacaciones de invierno: serán entre el lunes 21 de julio y el viernes 1 de agosto de 2025.
En Buenos Aires contemplaron un diagrama educativo con 185 días efectivos de clases. El fin de las tareas de enseñanza está previsto para el 22 de diciembre.
Según informaron en la Dirección de Escuelas, en el receso de invierno se habilitará “un período en el que se implementarán actividades complementarias orientadas al logro de los objetivos educativos de cada nivel y modalidad”.
También están previstas las llamadas “jornadas institucionales” en febrero, agosto y un tercer mes a definir, que se llevarán a cabo en forma regionalizada a lo largo del ciclo lectivo.
Se trata de capacitaciones para docentes en las que se analizan y evalúan los lineamientos generales contenidos en las currículas escolares.
Habrá una atención especial en las actividades destinadas a educadores del nivel medio. Serán “tareas reforzadas” en febrero de 2025, porque el año próximo debuta en Provincia un nuevo “régimen académico” para la secundaria.
Entre otras cuestiones se elimina la repitencia para los chicos que cursan de 1ro. a 6to. año y se buscará alinear el nivel con prácticas de tipo “universitaria”.
El nuevo sistema que debutará en 6.800 establecimientos públicos y privados bonaerenses incluye cambios en la evaluación, la acreditación, el diseño curricular y los dispositivos de acompañamiento. Por caso: a partir de la modificación habrá un sistema de acreditación por materia; las aprobadas no se recursarán. Los alumnos sólo deberán volver a cursar las asignaturas desaprobadas. Se intensificarán las materias pendientes de aprobación hasta que los estudiantes adquieran los conocimientos.
Los directivos docentes deberán fijar períodos de intensificación y profundización de la enseñanza para reforzar contenidos y materias en las que no alcanzan los objetivos planteados por el plan de estudio. También habrá modificaciones en los diseños curriculares de algunos cursos.
Antes de recursar un bloque de conocimiento, los estudiantes pasarán por un “período de intensificación”. Serán cuatro períodos de 15 días al inicio y final de cada cuatrimestre, en diciembre y febrero. Cuando se presentó el nuevo plan, desde el gobierno provincial plantearon que la reforma prevé “más tiempo de escuela”, especialmente para aquellos estudiantes que tengan mayores dificultades.