Lo negocia el ministro Trotta con las provincias. Sólo se suspenderían en enero y en mayo empezaría la Universidad.
El ministro de Educación Nicolás Trotta no quiso dar una fecha para el reinicio de las clases, suspendidas por la cuarentena del coronavirus, pero anunció que en 2021 la Universidad podría empezar su primer cuatrimestre en mayo para que los chicos puedan terminar el colegio.
El cronograma estimativo, que aún negocia con las provincias, consistiría en que el ciclo lectivo del último año de las escuelas tenga su trimestre de cierre en febrero, marzo y abril del año próximo y luego se inicien las cursadas en las universidades.
“Tenemos que poner el foco en la trayectoria educativa, que son los 14 años de educación obligatoria en Argentina. Nuestro desafío es que la desigualdad no se profundice y hará falta una reorganización entre el ciclo lectivo 2020, 2021 y de ser necesario de 2022. Vamos a poner el foco en aquellos que terminen nivel, que estén terminando la educación secundaria”.
“Podemos trabajar un módulo específico que surja del consenso, donde en los meses de febrero, marzo y abril se pueda intensificar los contenidos y garantizar los saberes y dar un cierre de los 14 años de educación obligatoria. Y proyectar, sin estigma, la educación universitaria, que excepcionalmente comenzaría en mayo”, anunció.
Trotta habló más de una hora que brindó en una teleconferencia con la Comisión de Educación del Senado, que obligó a la oficialista Cristina López Valverde a pedirle que finalice porque peligraba la transmisión. Aclaró varias veces, ante las más de 100 preguntas que le llegaron, que no hay fecha para vuelta a las clases.
“La no concurrencia fue una decisión epimediológica y la vuelta también lo será. Implica cambios de conducta hacia dentro de los propios sistemas educativos con los propios problemas de infraestructura que hay. Es complejo imaginar una vuelta simultánea de todos los estudiantes”.
Su larga exposición reconoció que muchas escuelas privadas no pueden pagar los salarios y por lo tanto no quiso obligarlas a bajar las cuotas, porque muchos padres aún en cuarentena puedan pagarla.
Y recordó las 150 mil computadoras que dijo haber encontrado en el depósito del Correo cuando llegó y nunca se habían repartido. “Cuando asumí también había computadoras sin entregar que eran de 2011”, lo cruzó su ex colega Esteban Bullrich. “Me genera estupor que haya computadoras de 2015; ahí no hay continuidad, ahí hubo inacción”, respondió Trotta.