Ex alumna de la sede de Quequén, de la Universidad Nacional del Centro, Patricia Sureda, recordó que ella iba a cursar caminando cuando, en esa época vivía cerca del hospital que Quequén.

Después de contar lo duro que fue para muchos de la clase trabajadora poder estudiar y también tener que irse de la ciudad hoy, como investigadora del Conicet, Mariana aseguró que en nuestro país tenemos una educación de calidad.

En ese marco, explicó que le están pidiendo a la sede de Quequén que funcione con el mismo presupuesto del año 2030.

“Esto no es un problema solo nuestro, es un problema de todos, porque si la sede de Quequén se queda sin presupuesto es lo mismo que cerrarla” sostuvo, remarcando que “no financiarla es una manera de cerrarla y es un problema de todos. Y esos chicos que, como yo, iban incluso caminando ya no van a poder estudiar.

“Tenemos que seguir acompañando a la universidad. No nos quedemos callados” reclamó.