Natalí Melo es una joven docente que viaja de lunes a viernes 200 kilómetros desde Bahía Blanca hasta Pelicurá, un pueblo de 28 habitantes perteneciente al partido de Tornquist, para darle clases a un solo alumno.
Cada día la docente emprende la enorme hazaña de recorrer kilómetros por las rutas de la provincia para reconcentrarse con su alumno Axel, “Me preguntan: ‘¿Te aburrís?’. Para nada, es llevadero. Él es super dinámico”, a Marcela Feudale en FM La Cielo.
La docente contó que tomó el cargo sin saber lo complejo que sería ir hasta el JIRIMM Nº 1 de Pelicurá. De hecho, en su primer viaje, se pasó de largo y se quedó sin GNC para volver a su casa, por lo cual tuvo que quedarse a dormir en el pueblo. Pelicurá tiene solo 500 metros de largo y las cuadras se dividen por la casa de cada vecino. A su vez, cuenta con un club, una biblioteca y un negocio.
A pesar de ese primer mal trago, Natalí siente un enorme compromiso y alegría de conocerse con el pequeño Axel. “Él vivía en el campo, empezó la escuela ahora y no tenía movilidad, dependía de la capaz del campo. Entonces consiguieron una casita muy precaria al lado del jardín. Antes le costaba ir”, narró Natalí.
“Cuando no iba todos los días me avisaban pero había veces que yo tenía que venir igual. No hay señal en el campo y tampoco podíamos hacer videollamada para hacer alguna actividad”, agregó.
Asimismo, la docente contó que cuando comienzan las clases junto a Axel realizan el saluda a la bandera y al jardín. Luego, articulan con la Primaria N° 9 para jugar en los recreos y realizar las actividades de artística y educación física. En primaria hay solo cuatro estudiantes. La docente a cargo tiene un alumno de primer grado, uno de tercero, uno de cuarto y otro de sexto.
Respecto a Axel, Natalí dijo muy emocionada: “Creo que es lo que cualquier docente haría. Hoy pienso que el me cambió la vida a mi y tal vez le puedo cambiar la vida a él también. Nunca me imaginé que podría darle clases a un solo alumno”.
“No tengo ganancia económica. Hay un montón de personas que piensan que ganas una fortuna y no es así. Pero tengo una ganancia sentimental, te llena. Lo vale”, manifestó.
A su vez, contó que mantiene una excelente relación con los padres del niño. “El papá está en el campo y la mamá está en la semana en el pueblo. Los días viernes los viene a buscar y se van al campo”. Además, relató que había una posibilidad de quedarse sin el cargo, ya que por motivos personales, Axel y su familia podía irse por un tiempo a Corrientes. “Me dijo: ‘Al final nos quedamos acá’, y la abracé. Después le pedí disculpas porque sentí que pasé el límite de la confianza. Ella se reía y ella me dice que están muy contentos”, afirmó.
“Yo me expongo a la ruta pero hay un montón de docentes que hacen dedo. Hay muchas historias de docentes que se desconocen y siempre se conoce lo peor de un docente”, cerró.
Fuente: Infocielo