1. El periodista José de Zer junto al Chango, su camarógrafo, emprenden el viaje hacia La Candelaria (Córdoba) tras recibir una propuesta extraña por parte de dos personajes sospechosos.

Al llegar al pueblo no hay mucho que valga la pena analizar allí, tan solo un pastizal quemado en medio de los cerros. Lo que vino a continuación fue la labor de un genio mitómano con un talento oculto: la creación audiovisual de presencia alienígena más recordada de la historia de la televisión argentina.

“El hombre que amaba los platos voladores”, de Diego Lerman, con Leo Sbaraglia enteramente canoso encarnando a José de Zer, ha sido elegida por el Festival de Cine de San Sebastián para integrar la Competencia Oficial junto a las nuevas películas de Costa-Gavras. Mike Leigh, Francois Ozon, Maite Alberdi, Iciar Bollain, Edward Berger y otros directores.

La mayoría de esas obras se anuncian como dramas, así que la de Lerman promete unas horas de respiro, algo de nostalgia por otros tiempos de mayor inocencia, y acaso una crítica a las picardías de ese periodismo que, cuando no las encuentra, inventa las noticias. ¿Pero hasta qué punto el propio José de Zer no estaba deseando sinceramente encontrarse de veras con platos voladores en la cima del Uritorco?

Quizá las nuevas generaciones no lo registren, y las viejas ya lo tengan medio olvidado. Nacido José Bernardo Kelzer allá por 1941, José de Zer fue periodista de “Gente”, “Siete Días”, Canal 9 y otros medios, fumaba como un murciélago, tomaba litros de café y tenía una singular capacidad de inventiva.

Él atrapaba a los televidentes del noticiero “Nuevediario” con informes sobre sucesos extraños, en particular la supuesta presencia de naves extraterrestres surcando sin aviso los cielos argentinos. Se dice que el noticiero alcanzaba picos de rating cuando aparecía de Zer con sus informes difícilmente comprobables, pero también vanamente refutables.

“El hombre que amaba los platos voladores” reelabora una anécdota que corrió en los ’80 en el ambiente periodístico: José de Zer había ido con su equipo a un pueblito cordobés donde no pasaba nada, pero él, partiendo de un pastizal quemado, inventó la noticia. Los curiosos que después se acercaron fueron tantos que, en el pueblo y en los alrededores del cerro Uritorco, todavía le dan las gracias.

Junto a Leo Sbaraglia actúan Sergio Prina, Osmar Núñez, Guillermo Pfening, María Merlino, Mónica Ayos, Norman Briski, Eva Bianco, Daniel Aráoz y Renata Lerman, la hija del director, quien compite por tercera vez en la Oficial de San Sebastián. Las anteriores fueron “Una especie de familia”, premio al Mejor Guión, y “El suplente”, premio a Mejor Actriz de Reparto precisamente para Renata.