En una investigación por estafa piramidal, los instructores del grupo de Delitos Complejos de la fiscalía general con la dirección del fiscal Guillermo Sabatini, concretaron una serie de allanamientos en distintos domicilios de nuestra ciudad donde se secuestró material de gran utilidad para la causa. Según fuentes judiciales informaron a TsnNecochea son más de 50 los vecinos estafados por este tipo de modalidad.
El procedimiento contó con personal de la Prefectura Naval Argentina y se secuestraron documentación y dispositivos electrónicos que están siendo analizados por los investigadores. También se encontraron billetes apócrifos por lo que se dio intervención a la Justicia Federal.
El esquema de Ponzi es un tipo de fraude de inversión, donde el pago a los inversores existentes se hace gracias a los fondos de los nuevos: los estafadores consiguen pagar los intereses de una inversión con el mismo dinero invertido. Es una operación financiera insostenible, y será rentable únicamente mientras los nuevos inversores estén dispuestos a financiarla.
Funciona mediante un operador que recluta a inversores a los que se les dice que obtendrán una gran rentabilidad por su dinero. Se pagan altos rendimientos a los primeros inversores, que se financian con el dinero de los inversores posteriores. Este esquema se derrumba inevitablemente cuando no hay suficientes inversores nuevos para pagar a los antiguos, y llega un momento en el que el estafador desaparece con todo el dinero. Los esquemas Ponzi se encuentran a menudo en empresas de marketing multinivel o en estafas de inversión que prometen altos rendimientos con poco riesgo.
¿Cuáles son las características del sistema Ponzi?
En un sistema Ponzi, una persona (física o jurídica) ofrece gran rentabilidad a inversores, gracias a lo que consigue fácilmente convencer a la gente para que se le preste capital para ser invertido.
El estafador atrae a los inversores prometiéndoles que pueden ganar mucho dinero, en muy poco tiempo, sin ningún riesgo financiero. Estos estafadores, hoy en día, utilizan las redes sociales, como Facebook, Instagram, Twitter y YouTube, para encontrar víctimas potenciales. En bastantes ocasiones, los inversores potenciales pueden llegar a ser incluso amigos y familiares, por lo que es probable que confíen en el estafador e inviertan en él.
Los estafadores promocionan su plan como una oportunidad para hacerse rico rápidamente y con poco o ningún esfuerzo. Este tipo de personas suelen argumentar a sus futuras víctimas que la inversión es una inversión de bajo riesgo y que tiene una alta tasa de rendimiento. Los estafadores intentarán hacer creer a los inversores que su dinero se destina a un proyecto confiable y de reputación. Normalmente también prometen que sus inversores recibirán pagos regulares si invierten en su plan. Y al principio esto se suele cumplir, pagando a los primeros inversores con el dinero de los nuevos inversores.