Por qué regresó antes a la radio que al ciclo de Telefe, cuál fue la conductora que pensó como posible reemplazo y la enseñanza que le dejó haberse contagiado. “Tengo un compromiso con el programa y con mi público”, dice
Las primeras alarmas sonaron con timidez para Andy Kusnetzoff mientras trabajaba en la misión solidaria de Radio Metro el 11 de julio pasado. Un poco de tos y no mucho más. Al día siguiente fue a hacerse el hisopado de coronavirus pensando que cumpliría con el trámite y regresaría a su hogar. Estaba equivocado: el resultado positivo estaba acompañado por una neumonía y debía quedar internado. Fueron unos días de incertidumbre, pero afortunadamente su evolución fue rápida, no debió enfrentar mayores complicaciones y una vez que recibió el alta se aisló de manera voluntaria para no contagiar a su familia.
El 3 de agosto se reincorporó a Perros de la Calle, su programa radial. Lo hizo de manera escalonada -primero una hora, después dos, hasta poder estar al frente del programa entero- porque a pesar de estar recuperado todavía se sentía débil, como si le hubiese “pasado un camión por encima”, según cuenta a Teleshow. Sin embargo, pasaban las semanas y se seguía postergando su regreso a la pantalla de Telefe. Muchas versiones han circulado sobre los motivos de la demora, que culminará hoy a las 22 con el regreso de Andy a la televisión con su exitoso PH, Podemos Hablar.
—¿Estamos ante un relanzamiento de “PH” o la vuelta de Andy?
—Es la vuelta, porque un relanzamiento tiene lugar cuando uno dice “quiero hacer cambios”, y acá hubo una “pausa por COVID”, que ya terminó y ahora sigue el programa. Me pone contento volver porque es muy significativo: mucha gente lo espera y brinda fuentes de laburo. Estando en el sanatorio vi mucha tele abierta, toda la que no vi en los últimos años, y creo que cumple un rol importante. Si bien no me gusta que le pongan la palabra “esencial” -porque esenciales son los médicos, el personal de salud y las fuerzas de seguridad-, el entretenimiento y la información tienen un lugar significativo. No todos tienen la posibilidad de tener computadora, Netflix ni cable.
—Se habló mucho sobre tu regreso a la radio y la postergación de la tele. ¿Qué fue lo que pasó?
—A veces se dicen cosas pero no se chequean y nunca me encargué de desmentirlas una por una. La radio la hago desde mi casa y empecé de a poco, sumando horas a medida que me iba recuperando. Es muy distinto que ir al estudio de televisión. El canal me apoyó desde el principio, me fue preguntando qué estaba para hacer y qué no, y estoy más que agradecido con eso. Además, no es que conduzco el programa y me voy: yo me involucro, hablo con todos, me genera estrés, presión y adrenalina. Y me encanta, pero quería estar físicamente bien, no me quería exigir. Por eso te digo que nunca hubo un tema con el canal. Ya estoy acostumbrado a que se digan cosas. Yo hablo cuando tengo algo para decir, y llegó el momento de volver, en una fecha con la que estoy totalmente de acuerdo con el canal. Para mí era importante que no me dijeran “chau, no tenés que volver”, ni “tenés que volver ya”.
—¿En algún momento pensaste en dar un paso al costado?
—Cuando volví a mi casa después de estar internado sabía que no estaba para retomar el programa, pero nunca fue un “no quiero volver”, sino un “ahora no puedo volver porque me tengo que ocupar de estar bien”. Te lo digo sinceramente: me llamaban Darío Turovelzky (director general para Cono Sur de ViacomCBS, multimedio al que pertenece Telefe) y Guillermo Pendino (responsable de contenidos del canal) para preguntarme cómo estaba, y yo les decía que seguía medio cansado. El día que me empecé a sentir mejor comenzamos a hablar de la vuelta y acordamos la fecha.
—¿Se barajó la posibilidad de un reemplazo?
—La verdad es que una vez que se confirmó mi positivo me internaron y me mantuve bastante al margen para no estresarme pero sí, se habló de eso con Telefe. Cuando me preguntaron dije que la que podría hacerlo es Vero (Lozano). No veo a cualquiera para este formato, pero ella es una conductora tremenda, es mi amiga, es psicóloga… Después creo que el canal decidió no hacerlo y me pareció bien. Pero no fue algo en lo que yo estuve tan activo: estaba ocupado en recuperarme.El conductor vuelve a ponerse al frente de su programa esta noche. Sus invitados serán Karina Jelinek, Fede Bal, Lizy Tagliani y Pampita (Foto: prensa Telefe)
—¿El formato del programa va a ser el mismo que venías haciendo este año?
—Sí, va a seguir en la línea del PH adaptado a tiempos de COVID. Me gustaría mucho mantener cosas originales del formato de antes, como los seis invitados en un estudio chiquito y acogedor, que esté en sintonía con la intimidad, que es la esencia del programa. Pero nos fuimos adaptando y vamos a mantener el estudio grande, con los invitados separados por acrílicos en la mesa, y ahora van a estar aún más distanciados. Para nosotros son muy importantes las medidas de prevención de contagio, soy un obsesivo.
—Después de casi cuatro años de programa, con tantos invitados que pasaron y en medio de esta situación, ¿cuál es la motivación para seguir haciéndolo?
—Me apasiona hacer PH. Cada programa es distinto y se da un clima diferente en base a los invitados. Es raro el momento que estamos pasando, pero no solo para PH; es distinta la vida que tenemos porque no hago nada de lo que hacía antes, como te debe pasar a vos y a todos. Este programa es de las pocas cosas que mantuve, adaptándome a las circunstancias, porque me dio muchas alegrías y me siento en compromiso con el programa y el público. Yo me involucro mucho en la producción, y si bien no estoy desde el principio con el tema de los invitados, muchas veces pasa que el día que vamos a grabar se cae alguno, y tenemos que resolverlo. Con cuatro invitados es mayor la presión que con seis porque no te puede fallar ninguno, y con la pandemia hay mucha gente que no sale de la casa, sumado a los que no se cruzan de canal. Pero tratamos de mantener el espíritu del programa y que se genere esa intimidad producto de la verdad, la diversión y la emoción.
—¿Te quedó miedo a volver a exponerte y al inevitable riesgo de que se contagien los invitados o algún trabajador del programa?
—La verdad es que me sigo cuidando como si no me hubiese contagiado nunca. Desde ese punto de vista, el miedo sigue igual. Más que miedo, tener todos los cuidados necesarios para que sea lo más seguro posible para todos. Hay veces que es inevitable y te toca o no te toca, porque en su momento también me había preocupado un montón y me contagié, y veo que todos los días hay dos o tres personas de las conocidas que se contagian. Supongo que todos estamos aprendiendo a convivir con esto.
—Hasta Juana Viale pidió que vuelva el programa para poder competir con vos…
—Sí, cuando la escuché en el sanatorio me dio gracia y después les agradecí a ella y a Nacho (Viale) en la radio. A Juana la conozco hace un montón, a Mirtha también pero obviamente es distinto porque es Mirtha Legrand. Juana es más contemporánea, vino mucho a la radio, nos reímos, tenemos amigos en común y no tengo ningún tema con ella. Ahora llegó el momento de volver, así que debe estar contenta…PlayAndy Kusnetzoff: “Quiero donar plasma al aire” (Video: Teleshow)
En el aspecto personal, la mirada de Andy nunca fue negacionista. La actual temporada de PH debutó casi en sintonía con el comienzo de la cuarentena obligatoria en el país, y pesar de sus exhaustivos esfuerzos por evitarlo, sabía que contagiarse era una posibilidad. Ni bien quedó internado se comunicó con los invitados de su último programa: Christophe Krywonis, Flor Vigna, Benito Fernández y Romina Malaspina.
“Todos fueron divinos conmigo, y como respetamos todos los protocolos nadie se contagió. Fue muy importante para mí porque sentía una gran responsabilidad… Primero, obviamente, por Flor (Kourney, su pareja) y Helena (su hija de cuatro años), y también con el equipo de producción y los que estuvieron en el programa”, cuenta a Teleshow.
Los días de internación estuvieron acompañados por “mucha videollamada” con su pareja y su hija, y una vez que recibió el alta tomó la precaución de aislarse en un departamento para no contagiarlas. “El día que me tocó volver a casa todavía tenía miedo porque quedás como un poco traumado -revela-. Veinte veces lo llamé al médico: ‘Estás seguro de que puedo volver, ¿no?’ Y el reencuentro fue hermoso, súper emotivo. Verla a Flor, Helena saltando de la emoción… No me largó por muchos días”. Con esa capacidad de introspección que lo distingue (muchos se la atribuyen a sus padres, el sexólogo Juan Carlos Kusnetzoff y la psicoanalista Esther Buchholz), el periodista comparte los aprendizajes que asimiló después de esta difícil experiencia.
—Este año era impensado y te das cuenta de que todo puede pasar, por eso hay que estar al día con los sentimientos y con todos. En ese sentido, trato de no estresarme tanto. Trabajo un montón y me estreso porque le pongo mucha pasión, y si me preguntás, el cuerpo habla. No te puedo decir que lo que me pasó es por esto, pero sí lo tomo como un alerta. De ahí que no tenía apuro en volver hasta estar bien. Mi prioridad es la salud.El reencuentro de Andy con su pareja y su hija (Foto: Instagram)
—¿Sabés si generaste anticuerpos?
—Sí, y creo que voy a poder donar plasma. Para hacerlo se tiene que cumplir un mes desde el alta y ahora se cumplió, así que estoy esperando una cuestión técnica del hospital para que me confirmen todo, pero ojalá que pueda y lo quiero hacer al aire porque me parece algo importante.
—Tuviste que pasar por esta situación unos meses antes de cumplir 50 años, ¿en qué momento de tu vida te encontrás?
—Estoy muy contento. No hay ningún mérito laboral que pueda hacerme sentir lo que siento al ver la familia que formé. No soy un adicto al éxito, al trabajo ni a nada. Soy un privilegiado, consciente de que la situación es muy difícil y que tener trabajo es un privilegio. Pero hay que tener empatía con los demás y con todo lo que está pasando. Si todos están mal alrededor tuyo, no podés ser tan feliz. Hay que tratar de ayudar y valorar lo que uno tiene, y me gustaría que mejore la situación de los demás.
—¿Creés que esta mirada social de alguna manera está relacionada con la familia que formaste en los últimos años?
—La mirada social la tuve siempre pero con una familia todo es distinto. Ya había tenido parejas y convivencias, sin embargo una hija te pone en un lugar en el que decís: “Así como me gusta que ella viva de tal manera y no le falte nada, también me gustaría que todos los padres puedan hacer lo mismo con sus hijos”.
Fuente: Infobae