Casi 9 millones de familias accedieron al Ingreso Familiar de Emergencia. El ministro destacó la importancia de los programas Potenciar Inclusión Jóvenes y Potenciar Trabajo. Se impulsará un bono para la Asignación Universal por Hijo antes de fin de año.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, aseguró que el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) “mostró el verdadero nivel de informalidad que hay en la Argentina” y precisó una serie de programas impulsados por el Gobierno para fortalecer a esos sectores porque, dijo, “aún hay muchos que tienen dificultades en sus ingresos”.
Arroyo señaló que el IFE “llegó a 9 millones de personas” y que de ese conjunto, “una parte logró volver al esquema laboral”, en tanto que a los que no pudieron hacerlo, se los va a “acompañar” desde el Gobierno nacional.
En declaraciones a Radio 10, el funcionario precisó que “hay cerca de 16 millones de familias y casi 9 millones accedieron” al IFE, lo que muestra “el verdadero nivel de informalidad que existe en la Argentina” .
Al ser consultado sobre la decisión del Gobierno nacional de no poner en marcha un cuarto pago del IFE, Arroyo dijo que, en cambio, el Gobierno nacional decidió impulsar dos planes como Potenciar Inclusión Jóvenes y Potenciar Trabajo.
Detalló que en el IFE “había tres realidades: las personas monotributistas de las bajas categorías; las que trabajan de la informalidad pero viven de sus propios ingresos como remiseros o taxistas y un sector muy fuerte que son los que hacen changas y que marcaron los 9 millones” de destinatarios del ingreso.
Arroyo sostuvo además que “en el noroeste, en el noreste y en el conurbano es donde está el problema más grave en Argentina” en cuanto a la vulnerabilidad de la población, y precisó que “en el conurbano” llega “casi 25 por ciento” del total de los Ingresos Familiares de Emergencia que entregó el Gobierno nacional.
El ministro indicó que “un tercio volvió al trabajo, que está en el rubro productivo; otro tercio no volvió y se quedó sin changas, como las empleadas domésticas y los jardineros y otro tercio que va mejorando lentamente el ingreso”.
Respecto al programa Potenciar Inclusión Jóvenes que lanzaron, explicó que está destinado a quienes tienen hasta 29 años y encuentran “mucha dificultad para volver al trabajo”.
Para ellos se dispuso “una beca de 8.500 pesos durante un plazo máximo de 12 meses”, que les permita “montar un proyecto educativo cultural o productivo”.
El otro programa que se lanzó fue Potenciar Trabajo, que permite el cobro de un salario mínimo para potenciar el trabajo con rubros determinados, y cuyos beneficiarios “van a recibir un bono antes de fin de año”, teniendo en cuenta que es un momento en el que “los precios aumentan”.
Según dijo, ese programa que actualmente beneficia a 700 mil personas “se va ir ampliando”.
Para dar una dimensión de la situación actual, transcurridos ocho meses de pandemia, y con algunas actividades ya abiertas, Arroyo dijo que en la actualidad tienen problemas “3 millones de personas”, que se consideran en situación aún vulnerable y que requieren asistencia.
En ese sentido, el funcionario puso de relieve que las personas “que reciben ese apoyo del Estado tienen que contraprestar o trabajar 4 horas, capacitarse en oficios o completar la escuela secundaria”.
También, y entre las medidas que llevará adelante esa cartera, Arroyo remarcó que se impulsará un bono para la Asignación Universal por Hijo (AUH) antes de fin de año.
Señaló que para ese beneficio se extendió un plus, y si bien se requiere un certificado de salud y educación, este año no se tomará esa condicionalidad por la pandemia, e igualmente podrán “cobrar en diciembre 6.000 pesos por hijo y, como el promedio es 2 hijos, van a cobra 12 mil pesos”
Finalmente, Arroyo manifestó su preocupación por el aumento del precios de los alimentos, al sostener que “el índice barrial da más alto” y que por esa razón en el programa Alimentar se “duplicó el monto”.
Actualmente para madres con un chico corresponde 4.000 pesos y 6.000 para madres con dos chicos, cifras que pasarán en diciembre a 8.000 y 12.000, respectivamente, recordó.