La justicia investiga el caso de un bebé de 4 meses que días pasados ingresó al Hospital Ferreyra, y dada la gravedad de su cuadro, los facultativos determinaron trasladarlo al Hospital Materno Infantil de Mar del Plata.
Los médicos de ese nosocomio, al detectar una serie de golpes que presentaba el pequeño, dieron aviso a la fiscalía de Mar del Plata quien llevó adelante las primeras actuaciones que luego remitió a la Fiscalía N° 10 de Necochea.
Las sospechas de los profesionales surgieron tras una serie de estudios médicos que determinaron la existencia de un coágulo en una de las capas del cerebro del bebé y hematomas en los ojos, lo que les permitió sospechar que pueda tratarse del síndrome del “bebé sacudido”.
Con posterioridad, se obtuvo un diagnóstico clínico que reveló la presencia de hemorragias subaracnoidea y retinianas, situación que agrava la salud del pequeño, según el criterio de los facultativos.
El fiscal Marcos Bendersky tomó declaración a médicos, psicólogos y profesionales de la salud que estuvieron en contacto con los padres del menor.
Ambos se encuentran con el pequeño por lo que no han podido entrevistarse aun con las autoridades judiciales.
Según fuentes judiciales, el bebé se encuentra en terapia intensiva, muy grave, con riesgo de vida y coma inducido ya que cuando intentan retirarle los medicamentos convulsiona de inmediato.
Según pudo saberse, la pareja esta compuesta por dos jóvenes que además tendrían más hijos. La asesora de incapaces sería quien intervino para contener a los pequeños que quedaron en Necochea.