Con el reinicio de la actividad en la Justicia tras la feria, el representante del Ministerio Público Fiscal comenzó la primera audiencia en la que leerá las concusiones acusatorias contra la vicepresidenta.
Con el cierre de la feria judicial, arrancó en Comodoro Py una nueva audiencia en el marco del juicio Vialidad contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, ex funcionarios y el empresario Lázaro Báez. No es una más: se trata del inicio de los alegatos del fiscal Diego Luciani, quien apenas inició su exposición dijo que existió “una asociación ilícita piramidal con los jefes de Estado en la cúspide”.
Con un tono de fuerte vehemencia, el funcionario del Ministerio Público sostuvo que “vamos a hacer un análisis de las 51 licitaciones públicas” que estuvieron bajo la lupa de la causa. A su vez, agregó que a lo largo de las próximas audiencias argumentará su hipótesis de que “la corrupción se presentó con comportamiento habitual, no eran prácticas aisladas sino que fueron hechos gravísimos que perduraron en el tiempo”.
En esa línea, Luciani inmdicó que en el marco de la organización “hubo distribución de funciones, mínima dirección y cierta jerarquía”. También manifestó en los primeros minutos de su exposición que “lo que ocurrió en Santa Cruz con la obra pública debe ser entendido como un caso paradigmático de la corrupción (ya que) se violaron los principios más básicos de toda contratación publica”.
El juicio que entró en su etapa final tiene como principal acusada de asociación ilícita, administración fraudulenta y e incumplimiento de deberes de funcionario público a la vicepresidenta. Bajo investigación hubieron una serie de maniobras supuestamente ilegales que se habrían organizado para beneficiar al empresario Lázaro Báez.
Fuente: Perfil