Más allá que muchas personas viven en los edificios de la Gran Galería Central, fueron muy pocas las que padecieron problemas de salud y no hubo heridos.


Sólo cinco personas debieron ser hospitalizadas, de las cuales cuatro fueron dadas de alta en forma inmediata y uno más debió pasar la noche en el Hospital Emilio Ferreyra para ser controlado, pero siempre estuvo en buenas condiciones.

Por otro lado, muchos de los residentes debieron ser asistidos en medio del incendio para poder salir del edificio hacia la calle 66.

Varios debieron bajar a oscuras por las escaleras.

Para ayudarlos estuvieron los Bomberos, Policías, Defensa Civil, Prefectura Naval, hasta el intendente Arturo Rojas colaboró para que puedan salir.