Por disposición del Observatorio Vial, dependiente de la Secretaría de Gobierno, personal de Obras Públicas está construyendo nuevos lomos de burro en distintas esquinas de la ciudad con el fin de reducir la siniestralidad vial.
Actualmente, las labores se ejecutan en la esquina de 57 y 30 y de 61 t 48, en base a un listado que marca los puntos donde es necesario que los automovilistas disminuyan la marcha.
En junio de 2021, la Organización Mundial de la Salud lanzó una recomendación para que en las ciudades se reduzca de 40 a 30 km/h la velocidad máxima. Según el estudio que acompañaba la propuesta, a esa velocidad, sólo 1 de cada 10 peatones atropellados tienen posibilidades de sufrir heridas graves o mortales, mientras que a 40 km/h, esa relación se invierte y el riesgo de lesiones graves pasa a ser de 7 de cada 10 peatones involucrados en accidentes viales.
Pero en Argentina, aunque muchos municipios lo han adoptado e incluso la propia Agencia Nacional de Seguridad Vial lo propuso como regla en 2021, en el marco de la Semana Mundial de las Naciones Unidas por la Seguridad Vial, el problema somos los automovilistas que no respetamos las normas.
Los lomos de burro no están contemplados en la Ley Nacional de Tránsito Nro 24.4490, pero eso aplica a rutas nacionales únicamente.