En horas de la noche del miércoles, personal municipal debió trabajar a contrarreloj para extraer dos árboles de grandes dimensiones que estaban a punto de caer sobre la vía pública.
Fue en calle 89 esquina 6 donde uno de los árboles había caído sobre otro y ambos estaban a punto de desmoronarse sobre la vía pública, poniendo en peligro la integridad física de los vecinos.
Trabajaron integrantes de Defensa Civil, la dirección de espacios públicos y tránsito.
La tierra removida por la lluvia, sumado a la antigüedad de estos ejemplares, fueron los desencadenantes de la situación que debió ser abordada de inmediato.