Parece mentira cuando se recorre el lugar que allí funcione una dependencia del estado provincial. La antigua casona donde está la comisaría de Quequén se cae literalmente a pedazos y hay espacios que ya debieron ser clausurados ante el peligro de derrumbe.
Si bien en el predio lindero se colocaron contendores para el trabajo de los efectivos policiales, en la casona están los calabozos con personas detenidas, la guardia y trabaja el oficial de servicio. Ahí, además, se atiende gente.
El municipio anunció el año pasado que los arreglos se harían a través del Fondo de Fortalecimiento de la Seguridad, oportunamente gestionado por el Departamento Ejecutivo Municipal ante el Ministerio de Seguridad de la Provincia.
En diciembre se realizó la licitación y dos empresas se mostraron interesadas en encarar las reformas de la Comisaría Segunda como así la ampliación edilicia del Cuerpo de Caballería en 10 y 127, por un monto superior a los 74 millones de pesos. Al momento, nada se concretó.
Según pudo saber Tsn Necochea, la empresa que resultó adjudicataria esta con problemas presupuestarios y la obra no se pudo concretar. El proyecto se presentó y se aprobó antes del desfasaje financiero de principio de año por lo que, los aumentos superiores al 200 por ciento en el valor de los materiales y mano de obra hicieron imposible que se pueda dar inicio a los trabajos.
Lo que debe evaluarse ahora es la posibilidad de hacer una reducción de obra y readecuación de precios.
En su última visita a Necochea, el ministro de seguridad bonaerense, Sergio Berni, se había comprometido a la construcción de un nuevo edificio, algo que tampoco prosperó.