El intendente Arturo Roas habló sobre la deuda que el municipio mantiene con la empresa de recolección domiciliaria de residuos y remarcó que la condición a la hora de negociar es la disposición final y el tratamiento de los residuos, algo que está en el convenio de concesión y que Relisa no hace.
“Queremos llegar a un entendimiento respecto a la deuda” indicó el intendente, recordando que “ya hay un convenio firmado desde 2016 por lo que trataremos de negociar de la mejor manera posible para lograr una quita de intereses, un plazo de gracia y el mayor plazo posible para poder ponernos al día”
“Hemos tomado la decisión política de pagar la deuda hasta que no se resuelva la cuestión ambiental” remarcó Rojas.
La empresa reclama una deuda que supera los 800 millones de pesos.