Estados Unidos acusó formalmente al miembro de la organización libanesa Hezbollah identificado como Salman Raouf Salman de organizar el atentado contra la AMIA, que hace 25 años dejó 85 muertos y 300 heridos.
El gobierno estadounidense ofreció una recompensa de hasta siete millones de dólares por cualquier información que lleve al arresto de Salman.
A su vez, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió sanciones contra Salman por “coordinar este devastador ataque” del 18 de julio de 1994 y dirigir, desde entonces, “operaciones terroristas para Hezbollah en el hemisferio occidental”, según indicó subsecretaria del Departamento del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financieras, Sigal Mandelker.
Durante tres décadas consiguió esconderse entre Líbano y América Latina. Posee múltiples refugios, variadas identidades y tejió una red de contactos lo suficientemente amplia como para evadir la prisión y armar una estructura de lavado de activos y tráfico de cocaína a su país, y desde allí a Europa y Oriente Próximo, informó la prensa internacional.
Esta información se conoce mientras el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, visita la Argentina.
Pompeo -que llegó esta madrugada al país- participa en la sede de la Cancillería argentina de la “Segunda Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo”, y en el marco de esa actividad estuvo más temprano en un homenaje a las víctimas del atentado a la AMIA, en la sede de la mutual judía, donde fue uno de los oradores.
Pompeo afirmó que el “Hezbollah fue el perpetrador del atentado a la AMIA” y calificó la organización terrorista de ” brazo oculto de Irán”.