“Edificio de la Cancillería Argentina. Ninguna concepción o política de Derechos Humanos puede justificar esta ofensa a la bandera nacional. No hay intervención artística que lo justifique. Tampoco fundamento ideológico alguno. Es un agravio enorme que debe ser reparado. Vergüenza”.
Con estas palabras, el exsecretario de DDHH Claudio Avruj criticó en Twitter la supuesta intervención de la bandera argentina. El paño cuelga en la puerta del edificio de la Cancillería argentina. Luego, el exfuncionario de Mauricio Macri tuvo que salir a reconocer su error. No se trataba de la bandera argentina “intervenida” sino de la bandera trans, que está ubicada en una de las entradas de la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores. Del otro lado: la bandera del orgullo.
Incluso, ante la pregunta de un usuario, el exsecretario de DDHH insistió: “Soy defensor de las políticas sobre diversidad. Estoy contra toda discriminación, no hay duda de eso. No se debe y no hay porqué intervenir la bandera nacional. Ese es mi punto”.
Horas después, en la misma red social, Avruj tuvo que aclarar: “Me debo retractar de mi error. Es la bandera del orgullo trans, no es intervención a la bandera nacional. Pido disculpas”.
“Llama poderosamente la atención que un funcionario que tuvo a su cargo las políticas públicas de DDHH y Diversidad Sexual, banalice la Bandera Trans días previos al 17 de mayo, Día Internacional contra la discriminación a nuestro colectivo”, dijo Pamela Rocchi, activista y militante trans de Santa Fe.
Las redes sociales también se llenaron de repudio: “No conocés la bandera trans, pero te autoproclamás defensor de la diversidad. ¿Cómo defendés algo que no conocés?”.
Fuente: TN