El gobierno argentino advirtió hoy que los incidentes producidos en la Asamblea Nacional de Venezuela son “inadmisibles para la convivencia democrática” y configuran un “nuevo obstáculo para el pleno funcionamiento del Estado de Derecho”.
La Cancillería expresó a través de un comunicado que “resultan inadmisibles para la convivencia democrática los actos de hostigamiento padecidos por diputados, periodistas y miembros del cuerpo diplomático al momento de procurar ingresar al recinto de la Asamblea Nacional, para elegir a las nuevas autoridades de su junta directiva”.
“En esa búsqueda, y sin pretender involucrarnos en la situación interna de otros países, instamos a todos los partidos representados en la Asamblea a reencausar el proceso de elección de sus autoridades, en el pleno respeto de las reglas constitucionalmente establecidas”, indicó el documento del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Además, el Gobierno hizo un llamado a “las democracias del mundo a que ayuden a facilitar ese proceso de diálogo para que Venezuela pueda recuperar a la brevedad la normalidad democrática que históricamente ha caracterizado a ese país”.
“El resguardo de la independencia de los poderes y de las inmunidades de los parlamentarios son condiciones indispensables para el normal funcionamiento del sistema democrático”, concluyó el texto.
En Venezuela, el diputado Luis Parra, antiguo opositor señalado como partícipe de un escándalo de sobornos, fue designado hoy presidente de la ANV para suceder a Juan Guaidó, con los votos de los legisladores chavistas y de los disidentes de la oposición.
Parra fue designado en una sesión que el grueso de la oposición calificó como “irregular”, después de denunciar que la Policía Nacional Bolivariana (PNB), controlada por el chavismo, impidió el ingreso de numerosos legisladores al recinto, incluido el propio Guaidó.