El Gobierno anunciará este miércoles la actualización del Índice de Movilidad Jubilatoria de los haberes de jubilados, pensionados y prestaciones sociales, que se estima que sea entre el 15,3% y 16%.

Además se espera que se comunique la otorgación de un bono o directamente un aumento adicional permanente del haber mínimo.

La Ley de Movilidad establece que el incremento se basa en el cálculo que actualiza los montos en base a un coeficiente elaborado en partes iguales por la recaudación previsional y la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte).

Con un aumento del 15,3%, el haber mínimo de $37.525 subiría a $43.266. La PUAM (Pensión al Adulto Mayor) de $30.020 aumentaría a $34.613. Las pensiones no contributivas treparían de $26.267 a $30.285. Y el haber máximo de $252.507 a $291.140. Con esos valores, las jubilaciones y pensiones volverían a perder frente a la inflación.

Las jubilaciones y pensiones aumentaron en junio un 15% según la fórmula de movilidad, lo que sumado al 12,28% de marzo, representó un incremento del 29,12% en el primer semestre del año frente a una inflación que lleva acumulado un alza del 36,2% en lo que va del 2022 y 39,9% en el rubro alimentos.

Los beneficiarios que cobran los haberes más bajos, tuvieron un refuerzo de ingresos de $18.000 que se abonó en dos partes: abril ($6.000) y mayo ($12.000). Aquellos que no recibieron ningún bono, sufrieron una pérdida del 5,2%.

Con el aumento en torno al 15,3/16% en septiembre, la suba acumulada de septiembre a noviembre sería del 49/50%, bastante por detrás de la inflación esperada que para noviembre podría escalar al 70/75%.