Con el objetivo de “brindar una respuesta inmediata frente a las actuales circunstancias coyunturales”, el Gobierno nacional volvió a suspender el incremento en el impuesto a los combustibles líquidos, que ya había sido postergado a principios de febrero. La medida fue anunciada en el Decreto 196/2020 publicado hoy en el Boletín Oficial.
A través de este documento, que lleva la firma del presidente Alberto Fernández, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y su par de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, se precisó que las subas que iban a darse este sábado se aplazaron hasta el “31 de marzo de 2020” y aquellas que estaban previstas para el “1° de marzo de 2020” se pasaron al “1° de abril de 2020”.
De esta manera, el Poder Ejecutivo decidió correr para más adelante las diferentes actualizaciones tributarias para la nafta y el gasoil, que originalmente estaban previstas para finales del 2019 pero que se fueron postergando sistemáticamente para “estabilizar los precios”.
Los impuestos en cuestión son a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, que se venían actualizando trimestralmente según la inflación, de acuerdo a la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide el Indec.
El ex presidente Mauricio Macri salteó el que estaba dispuesto para octubre del año pasado y luego su sucesor, Alberto Fernández, hizo lo mismo en diciembre y enero último, basándose para ello en la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva.
Si bien las petroleras estiman que los valores actuales tienen un retraso, a partir de esta nueva prórroga seguirá sin haber grandes cambios en los surtidores: este gravamen hubiera representado un incremento del 2% en el precio final que pagan los consumidores en las estaciones de servicio, según las estimaciones del mercado.
Con diez aumentos a lo largo del año pasado, los precios de las naftas y el gasoil se incrementaron en promedio un 41,8% durante 2019. La última postergación de este impuesto se dispuso en enero, cuando se fijó la suba para finales de febrero y principios de marzo.
En los Considerandos, el Gobierno señaló que las sucesivas postergaciones “han obedecido a la necesidad de brindar una respuesta inmediata frente a las actuales circunstancias coyunturales y de estabilizar los precios de los combustibles comprendidos en su alcance”.
Además, resaltó que “a efectos de encontrar soluciones de mediano y largo plazo, el Poder Ejecutivo Nacional continúa analizando de manera integral la actualización” de los mencionados impuestos, pero que por el momento “resulta oportuno, en esta instancia, disponer un nuevo diferimiento de los incrementos”.
Por otra parte, la caída del precio del petróleo a nivel internacional es otro factor que el Gobierno considera para mantener el precio de los combustibles sin alzas durante el tercer mes del año.
El atraso que mantenían, por no haber incrementado su precio de venta al público en los surtidores, se redujo de 16% a 5%, como consecuencia de la baja del petróleo, que cayó más de USD 10 en los últimos días.
“No creo que haya una actualización de la carga impositiva para los combustibles. Creo que hay una intención de que este ‘congelamiento’ se mantenga durante los 180 días de la Ley de Emergencia”, opinó al respecto Gabriel Bornoroni, presidente de Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha).