El Parque Eólico Vientos de Necochea está prácticamente concluido, con sus once generadores en pie ya instalados, y será puesto en marcha en diciembre próximo, según lo previsto. Así lo aseguró Gustavo Castagnino, director de asuntos corporativos de Genneia, empresa que lleva adelante el proyecto energético construido a pocos metros del mar, a la altura de Punta Negra, en un predio conocido como “campo de Cipriano”.
Por estos días la obra se halla paralizada, encontrándose suspendidos unos 50 trabajadores por parte de las empresas contratistas.
Una situación similar se produce en otros parques eólicos que está montando Genneia en la provincia de Chubut, siendo 900 los operarios que se hallan suspendidos.
Pero es muy distinta la situación del Parque Eólico Necochea respecto de los del sur del país.
En Necochea el parque eólico está prácticamente concluido. El montaje está terminado y falta dotarlo de energía, para hacer posteriormente las pruebas correspondientes. Y, pese a inconvenientes suscitados a partir de los vaivenes de la economía nacional, aseguran que en diciembre comenzará a funcionar.
Distinta es la situación en Chubut, donde quedó pendiente el financiamiento de las obras en aún en ejecución pero con avances mucho más acotados. Al no haberse materializado la entrega de unos 300 millones de dólares para la construcción de los parque eólicos, Genneia y empresas asociados decidieron la suspensión momentánea de unos 900 operarios.
A raíz de esta situación, el Ministerio de Trabajo de la Nación convocó a una reunión conciliatoria para esta semana. De la misma está previsto que participen representantes de Genneia y de la Uocra, así como de Nordex, empresa alemana desarrolladora de los parques de Chubut.
El crédito por $300 millones de dólares para llevar adelante esos parques eólicos estaba acordado con un banco alemán. Pero el desembolso no se pudo concretar, adjudicándose la razón a recientes normativas del Banco Central.
La entidad financiera germana no quiso correr riesgos y desde Genneia aguardan que pueda destrabarse la situación a través de negociaciones, de modo que el dinero de los créditos otorgados sea desembolsado.
En Necochea la situación de muy diferente. El parque eólico ya es una realidad y falta muy poco para que los molinos comiencen a funcionar, una vez que se cuente con energía, para lo cual se hizo una extensa conexión subterránea a lo largo de la Avenida 10, entre el predio de Punta Negra y la central energética ubicada en la zona portuaria.
El Parque Eólico Vientos de Necochea se construyó en el marco del programa RonvAr 1,5. Se compone de once aerogeneradores que fueron provistos por la empresa danesa Vestas. Totalizará una capacidad instalada de 38 megawatts. Generará energía limpia equivalente al consumo de 53.000 hogares