La pena de 12 años de prisión recayó sobre un hombre por haber abusado sexualmente de una menor de edad. El autor del aberrante delito es Carlos Luayza, quien continuará detenido en la Unidad Penitenciaria Nº 15 de Batán.

El caso fue ventilado a mediados de mayo último en un juicio por jurados, siendo el primero en la modalidad de abuso infantil, que terminó con un veredicto de “culpabilidad” por unanimidad de los llamados “jueces del pueblo”.

Durante esa instancia oral pasaron unos treinta testigos que dieron su testimonio ante el jurado y las partes.

Los hechos fueron denunciados en agosto de 2016 habiendo tomado intervención la Fiscalía Nº 10 que se ocupa de abordar la temática de violencia de género e integridad sexual de la personas, que con la colaboración de la policía inició la investigación para la etapa de recolección de pruebas.

Con los elementos reunidos más tarde se logró la detención del acusado de “abuso sexual gravemente ultrajante”.

En el momento en que se produjo la elevación de la causa a juicio el hombre manifestó su voluntad de ser juzgado por seis hombres e igual número de mujeres, debate que fue coordinado por la Jueza Luciana Irigoyen Testa.

En aquella oportunidad la deliberación de los doce ciudadanos se extendió por espacio de más de una hora, concluyendo en un veredicto que declaró de manera unánime “culpable” a Luayza.

Cumpliendo con los pasos que establece la ley penal para este tipo de procedimiento, con posterioridad tuvo lugar la audiencia de cesura de juicio en la que las partes analizaron la pena a aplicar.

En ese sentido el fiscal Eduardo Núñez realizó un alegato que terminó con la solicitud de una pena de 15 años de prisión. En tanto, la defensa, a cargo del abogado penalista Ángel Fernández, pidió que se aplicara el mínimo de la escala penal para ese delito, es decir 8 años de cárcel.

La mencionada magistrada analizó lo sucedido durante el juicio oral y la petición de las partes, para luego establecer un castigo de 12 años de prisión para el autor del abuso infantil.

Inmediatamente el hombre fue esposado por los efectivos del Servicio Penitenciario de Batán que procedieron a su traslado hasta ese establecimiento carcelario.

Fue el primer juicio por jurados en el Departamento Judicial Necochea para este tipo de delitos, mientras que en los días posteriores le siguió otro hecho de la misma modalidad en la que un hombre abusó sexualmente de sus dos hijas menores de edad y que también fue declarado “culpable” y días después recibió una condena de 20 años de cárcel.