Ambas iniciativas obtuvieron dictamen de comisiones el pasado jueves. Se espera llamado a sesión especial para tratarlos y aprobarlos.
La Cámara de Diputados buscará sancionar esta semana el proyecto de reforma del impuesto a las Ganancias, por el cual el eleva hasta $150.000 bruto el piso desde el que se comienza a pagar, y la iniciativa que modifica el Monotributo, para generar un puente a los contribuyentes que deben pasar al régimen general y que determina las escalas de facturación y cuotas mensuales que regirán en 2021.
Las iniciativas, una presentada por el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa (Ganancias), y la otra por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), apuntan a volcar dinero fresco en el bolsillo de la clase media en el arranque del año electoral, que tendrá a fines de octubre los comicios legislativos. La intención oficial es que esta semana ambos proyectos lleguen a la discusión en el recinto y que hacia fin de mes sean convertidas en ley por el Senado.
Para eso, se convocará a una sesión especial, que puede ser el martes o el jueves, dado que el 24 de marzo es feriado del Día de la Memoria. Si el llamado se concreta será la primera sesión del período ordinario del Congreso en la que, al menos de manera preliminar, habría amplio consenso entre las fuerzas políticas para aprobar las iniciativas.
Sí hubo acuerdo de Protocolo de Funcionamiento para que esta sesión especial se realice bajo la modalidad mixta, que prevé la actividad presencial en el recinto a excepción de los grupos de riesgo que podrán hacerlo de manera remota. La votación se realizará a través del sistema VPN.
Al recinto llegará el proyecto presentado por Massa, y que tuvo varias modificaciones mientras se trataba en comisiones, por el cual se modifica el artículo 30 para aumentar la deducción especial a partir de la que se calcula el impuesto a pagar. El objetivo es que no paguen ese gravamen los trabajadores que cobren hasta $150.000 brutos y los jubilados con ingresos equivalentes a ocho haberes mínimos.
El universo alcanzado es de 1.267.000 de personas, de los cuales 200.000 son jubilados. Si se aprueba la ley, el 93% de los adultos mayores con haberes previsionales no estará alcanzado por Ganancia, remarcó el titular de la Cámara de Diputados.
Antes de llegar al recinto, la iniciativa incluyó cambios solicitados por los gremios: excluir del cálculo al aguinaldo, deducción por concubino/a. También se sumó una deducción por gastos de guardería hasta los tres años por hasta $68.400, por elementos de trabajo o capacitación.
La suba del mínimo no imposible será retroactiva al 1° de enero, por lo que los trabajadores recibirán con el sueldo de abril (si la ley es promulgada durante los primeros días del próximo mes) una devolución de $7891 promedio por cada mes que se le descontó el gravamen durante el primer trimestre. Las cifras difieren de un trabajador a otro según su ingreso y las deducciones que ya aplica.
La iniciativa también prevé que el Ejecutivo tendrá facultades específicas para disponer de una deducción especial para que los asalariados que ganan entre $150.000 y $173.000 brutos no terminen pagando más por el corrimiento de las escalas.
Al recinto también llegará la reforma del Régimen Simplificado de Pequeños Contribuyentes (más conocido como Monotributo), que actualiza las categorías de facturación y cuotas mensuales a la vez que genera una transición más ordenada con el Régimen General, donde se deben tributar Ganancias e IVA.
Sobre el primer punto, el proyecto establece que los parámetros del Monotributo aumentarán 35,3%, en línea con lo que lo hicieron los haberes mínimos de los jubilados y pensionados a lo largo del año pasado. En tanto, para los períodos fiscales subsiguientes, el índice de actualización seguirá a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria, que se actualiza por salarios y recaudación previsional.
En cuanto al segundo punto, la iniciativa busca una “transición armónica y permanente” entre el Monotributo y el Régimen General (RG). Considera a los que deberían haber quedado fuera del régimen simplificado en 2020 pero por la suspensión de exclusiones aún siguen contenidos en él; a los que lo harían en 2021 y a de los siguientes años con distintas modalidades y beneficios.
“Se establece un régimen permanente que hace menos gravoso pasar al régimen general y también es una ganancia para el Estado ya que dispondrá de mucha más información, habrá mayor control por oposición”, indicó la jefa de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont al exponer ante el plenario de comisiones de Diputados. (TN)