Cincuenta años atrás, una computadora de la Universidad de California (UCLA) y otra situada en un aula del Instituto de Investigaciones de Stanford (SRI), a 568 kilómetros de distancia, lograron establecer una conversación por primera vez en la historia. Fue el nacimiento de Internet, un cambio cultural que en Argentina se masificó recién 26 años más tarde. Desde aquel acontecimiento el sistema continuó evolucionando –tanto en velocidad como en diversidad de aparatos- hasta llegar a su mayor impacto en la vida cotidiana: Internet de las Cosas (IoT).

¿Cuántos objetos tienen hoy conexión en la casa?

En nuestro país, el electrodoméstico inteligente​ con mayor presencia es el televisor, que hoy está en el 65% de los hogares (en 2017, eran 57%). Le sigue en popularidad la consola de juegos (27%) y uno de lo que más creció es el dongle HDMI (como Roku, que permite convertir una pantalla en un smart) que pasó del 14% al 18% en el último año.

Mientras que los smartwatch (11%) y los eReader (9%) son los que logran una mayor proyección en el mercado argentino. Así lo refleja un estudio de la consultora Deloitte que cuantificó el número de dispositivos que proveen conexión hogareña en la vida cotidiana.

El reporte está basado en una encuesta global realizada por la firma, que une 6 continentes, 31 países y 49.000 entrevistados, cubriendo una porción muy importante del mercado mundial. Esas conclusiones están basadas en el análisis de los datos cosechados en 2018 y difundidos en estos días. En Argentina, la muestra se realizó sobre 2.000 casos, integrando diferentes edades, regiones, niveles de ingresos y perfiles de consumo, entre otras variables.

Dispositivos del hogar conectados a Internet 

Por fuera de los electrodomésticos, los teléfonos inteligentes -los dispositivos desde los que se conecta el mayor número de personas- fueron concebidos como herramientas que facilitaban el contacto entre los individuos. Pero su gran capacidad de procesar información en tiempo real, los convirtió en el instrumento perfecto para combinar actividades profesionales con aspectos sociales.

En Argentina, en promedio, el 91% de sus habitantes guarda un celular en su bolsillo, según los cómputos de Deloitte. A cinco años del estreno del 4G, la red móvil de alta velocidad está presente en 29 millones de líneas, lo que representa más del 60% de las 48 millones totales, según datos de la consultora Carrier y Asociados. La tercera generación (3G) es la segunda tecnología más utilizada, con 9 millones de líneas.

En cuanto a las actividades diarias que más crecieron con el teléfono, el control de saldos bancarios pasó de un 23% al 37% en un año. Mientras que la transferencia de dinero a otros individuos fue del 26% al 41%. Si estos valores se cotejan con el de los países desarrollados, se encuentran que están entre 5 y 10 puntos por debajo.

En el primer cuatrimestre, los movimientos del dinero digital alcanzaron un nuevo récord en la Argentina, al representar el 33,2% de los depósitos en cajas de ahorro y cuentas corrientes. Así lo indicó el informe elaborado por UDE Link, el índice que mide la evolución del dinero electrónico en el país. También se convirtió en récord la cantidad de transacciones realizadas por Home Banking, que llegaron a 177,7 millones con un promedio en el mes de 84 por usuario.

El móvil también democratizó la posibilidad de jugar. El 38% prefiere competir desde “el celu” antes que la consola, que obtuvo el 13%, Este año, la industria de los gamers generó en la Argentina unos US$ 495 millones y el país se consolida como el tercer mercado regional, según reveló el Global Games Report elaborado por la consultora especializada en videojuegos Newzoo.