El Quo Vadis fue un pequeño barco pesquero de madera de 10 toneladas y 13,35 m de eslora. Era un tipo de barco de los denominados comúnmente en argentina lanchas amarillas. Este color se emplea para señalizar que corresponden a la flota pesquera de pequeña escala o costera

El “Quo Vadis” regresaba el 29 de agosto de 1946 desde Claromecó, pero corría un fuerte temporal del sud-oeste, con vientos de 60 km/h y ráfagas de 90 km/h.

Buscando refugio en su puerto de matrícula, navegando a motor ayudado con trinquetill, una fuerte y sostenida ráfaga lo montó en una gran ola.

Ya resentido en su casco cuando un golpe de mar lo tomó de proa, lo sentó de popa y al estabilizarse por hábil maniobra es nuevamente azotado por otro golpe que lo tumbó destrozándolo totalmente a solo 600 m de la boca del Puerto Quequén.

De la tripulación completa del barco pesquero, compuesta por siete marineros, sólo dos lograron sobrevivir. Una de ellas llegó casi desnudo a la playa de Quequén, y que se acercó a una casa de familia que lo socorrieron; al día siguiente encontraron a otro sobreviviente que había nadado durante nueve horas hasta alcanzar la costa. El resto de la tripulación falleció en el naufragio, todos ellos argentinos de entre 25 y 38 años.​ Sus cuerpos, así como restos del naufragio, quedaron diseminados a lo largo de más de 2.000 m de playa.

Durante la misma tormenta también naufragaron otros cuatro barcos pesqueros, como El Halcón, Pumará, Palma Grande, Happy Days. En total, durante la tormenta del 29 de agosto de 1946 murieron 31 pescadores, de los cuales muy pocos cuerpos se pudieron recuperar.

Con información de Wikipedia y el Área de Museos