Por Alejandro Sánchez
De despacharse mañana -como parece que ocurrirá-, el próximo martes después de las 19.30 los concejales comenzarán a tratar el Presupuesto de Gastos y Recursos de 2022, en lo que será la última sesión del Concejo Deliberante del año.
El tratamiento de dicho presupuesto hasta el momento ha sido tranquilo, donde la oposición ha buscado datos, pidió aclaraciones, preguntó y ahora cada bloque lo está analizando.
Algo que no cayó bien en las bancadas opositoras fue que los funcionarios que concurrieron al Concejo a dialogar con ellos, fueron a responder preguntas y no hicieron una presentación formal del presupuesto, destacando diferentes puntos de interés para el Ejecutivo.
Más allá de eso no ha habido críticas ni en forma pública, ni en privado.
Si va a haber en la sesión cuestionamientos o preguntas de por qué se destina una partida mayor o menor a cada área; hablarán del organigrama municipal y cosas así, pero difícilmente, este presupuesto sea rechazado.
Está claro para todos que el presupuesto marca las prioridades para ese año del Gobierno Municipal y en esta oportunidad será la obra pública, algo que se había evidenciado con la designación de Adrián Furno en dicha secretaria, tras una destacada gestión en el Ente Vial.
Un dato a tener en cuenta es que del presupuesto de $5.870.763.776, un 48% será utilizado para abonar sueldos del personal y 52% para bienes y servicios. Acá hay un dato para contrastar y es que en 2009 del presupuesto, un 54% se utilizaba en gastos del personal y el 46% se utilizaba para gastos de bienes y servicios.
En caso de aprobarse, la gestión que encabeza Arturo Rojas habrá logrado el aval a la fiscal impositiva y al nuevo presupuesto, las dos principales herramientas de gestión para un Ejecutivo. Lo que no es poco.
Luego se pondrá en funcionamiento el nuevo organigrama municipal -donde destaca la fusión de la secretaría de producción y turismo-.
Pasará el 2021, dejando atrás la segunda ola del Covid, las PASO y las elecciones. El 2022 arrancará con un gobierno municipal consolidado, que sabe que, ahora, las expectativas de la gente serán superiores.