Para todos los amantes de la astronomía, hoy puede ser un gran día. Será visible la conjunción Júpiter y Saturno, que formarían la llamada “Estrella de Belén”.
Va a ser la primera vez en casi 400 años que esté tan cerca Júpiter de Saturno, y van a darle a los ojos de todos los espectadores uno de los fenómenos más asombrosos del año y quizás del milenio.
Es conocida como la Estrella de Navidad, formada por estos dos planetas, los de mayor tamaño del Sistema Solar, Saturno, el de los aros y las lunas y Júpiter el del nombre de dios pagano.
Como es obvio los cuerpos celestes no se juntan físicamente, si no que su alineación es muy pareja y forman una imagen como de una super estrella en forma de “planeta doble”.
Sin embargo, en la realidad espacial, estos dos planetas estarán separados por millones de kilómetros.
En Astrología, los estudiosos creen que es la misma estrella que guió a los Reyes Magos en la historia del nacimiento de Jesucristo , es decir, La Estrella de Belén, la ciudad de su natalicio.
De la última vez que se vio la Estrella de Belén (o Jupiter y Saturno alineados y mostrándose como si fueran uno solo) ya hace casi 8 siglos. Sí, 800 años. Exactamente, en el año 1226, cuando la humanidad era otra cosa en materia científica, tecnológica y geopolítica. Faltaban más de 250 años para la llegada de los conquistadores al continente americano.
La Estrella de Belén estará en su apogeo hoy, día del solsticio de verano aquí en el hemisferio sur, y va a poder ser admirada simplemente con levantar la vista, por supuesto desde un sitio despejado y en donde no haya demasiada luz ambiente.
Debe recordarse que el evento no será solamente esta noche sino Júpiter y Saturno destellarán durante toda esta semana, debido a que es cuando los planetas estarán en camino a la alineación más cercana.
Prácticamente desde cualquier parte del mundo se podrá apreciar la conjunción de planetas. Entre más cerca de la línea del Ecuador, la duración será más prolongada. Y siempre y cuando las condiciones meteorológicas sean de cielo despejado, por supuesto.
Debido a su gran luminosidad no es necesario contar con algún tipo de herramienta especial, ni larga vistas ni telescopios para observar a simple vista la Estrella de Belén, pero quien tenga o pueda acceder a un observatorio abierto en cualquier lugar del mundo con alguno de ellos, se recomienda absolutamente su utilización, para poder sacarle el mayor provecho posible a uno de los eventos astronómicos más atractivos de la humanidad.
Si por lo climático o cualquier otro inconveniente alguien no va a poder verlo, o simplemente se olvida, no hay inconveniente si es una persona joven. Habrá una nueva chance el próximo 31 de octubre de 2040, así que ¡A no dejarse estar!
Se pueden tomar fotografias de la estrella de Belén, lo que no puede faltar es un tripode y ajustar la cámara allí, para luego enfocar. Debe colocarse una exposición correcta (se recomienda un ISO al mínimo y diafragma cerca de su punto dulce).