La Canasta Básica Total (CBT) registró en febrero un aumento de 2,7%, respecto de enero, y una variación interanual de 42,2%, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Según datos del Indec una familia tipo necesita de 58 mil pesos para no caer bajo la línea de la pobreza y 24 mil para no caer en indigencia. Por primera vez desde septiembre estas variables terminaron por debajo de la inflación.

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) indicó que la Canasta Básica Total (CBT), que mide los recursos necesarios para no caer en la pobreza, aumentó un 2,7 por ciento en febrero y acumula una suba del 7 por ciento en lo que va del año lo que implica un 42,2 por ciento interanual.

La Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide la indigencia, tuvo un incremento del 3,6 por ciento respecto de enero y acumula un 8,4 por ciento en este año y una suba interanual del 46,4 por ciento.

En relación a estos datos, una familia compuesta por dos adultos y dos niños necesitó contar con unos ingresos de 24.575 pesos para no caer en la indigencia y de 57.997 pesos para no caer debajo de la línea de la pobreza.

La CBT incorpora al cálculo los bienes y servicios no alimentarios como tarifas de servicios públicos, vestimenta, transporte y educación. Con estos datos y las estadísticas sobre los ingresos de los grupos familiares se define el índice de pobreza.

Por primera vez desde agosto de 2020, el valor de la canasta básica fue inferior a la inflación. En los meses anteriores el precio de los alimentos había disparado estas variables, lo que se establecía como un indicador de que los incrementos golpeaban con mayor fuerza a las familias de menores ingresos, cuyos gastos están mayormente destinados a la alimentación.