Con el objetivo final de modificar el comportamiento de los conductores en la vía pública y reducir, de esa manera, los riesgos de siniestralidad, el municipio comenzó ayer con una serie de intervenciones urbanas que se darán en distintas avenidas de Necochea.
Apoyados en los datos que arroja el Observatorio Vial, para demarcar los puntos más peligrosos y actuar en consecuencia, la primera de estas acciones se desarrolla en la intersección de 58 con calle 63, donde las cuadrillas municipales de Señalización estuvieron dando los primeros pasos del operativo.
Para minimizar los riesgos de accidentes en esta esquina, una de las más peligrosas según los precisos testimonios que brinda el espacio municipal, el procedimiento contempla la instalación de bolardos con sus respectivos delineadores y la limpieza de las ochavas, con el fin de reducir la calzada y provocar el consecuente aminoramiento de la marcha de los rodados que la transitan, lo que redundará en la priorización del paso peatonal.
Walter Calabretta, el titular de la Subsecretaría que funciona bajo la órbita de Gobierno, explicó al respecto que “este es el primero de los nueve puntos que se van a intervenir, con presupuesto municipal (se estima en unos 8 millones de pesos para el total de las acciones), en las avenidas 42, 58 y 74”.
Sobre las labores en específico, el funcionario aportó, además, que “estamos aprovechando para señalizar bien las bajadas para personas con movilidad reducida, así como la demarcación de las sendas peatonales”.
Vale recordar que esta tarea es la continuidad de un plan que comenzó a ejecutarse el año pasado con la demarcación de descansos peatonales, delimitados por reflectivos rebatibles de color naranja, en la Diagonal San Martín y en las avenidas 2 y 502.