Con el objetivo de contener el precio del pan, el secretario de Comercio Interior, Martín Pollera, convocó a una mesa de trabajo con todos los actores de la cadena productiva y anunció la incorporación de más molinos al fideicomiso del trigo.
Las cámaras panaderas, por su parte, se comprometieron a mantener un precio “razonable” del pan en todo el país.
En nuestra ciudad, algunos comercios ya cobran 350 pesos el kilo de este producto, pero intentan que no llegue a los 400, según le explicó a TsnNecochea el panadero Alberto Sabatini.
La suba se produce por el gran faltante de materias primas, el aumento que registró la harina en las últimas semanas y el resto de los insumos necesarios para ser elaborado.
La bolsa de harina de 25 kilos (subsidiada) que utilizan las panaderías cuesta $1346 más impuestos, pero sin subsidios, cuesta $2.500. Por esa razón, el kilo de pan, que hoy está a $300 o $320, puede pasar a $340 si consiguen harina subsidiada. Pero si, deben utilizar el insumo sin el subsidio oficial el precio del pan podría trepar hasta los $400.
El aumento seguramente se trasladará al precio de las facturas dado que, según los panaderos, también se registran mayores costos en otros insumos como grasas, azúcar y margarinas, entre otros elementos que utilizan en esos alimentos.