El primer accidente ocurrió temprano, en la intersección de las calles 26 y 63 cuando un hombre que conducía un Ford Fiesta Max de color negro perdió el control del vehículo y chocó contra un poste de cable de una de las esquinas provocando este impacto el vuelco total del auto que quedó con tres ruedas hacia arriba y otra que se salió sobre la calle 26, según pudo saberse, el joven iba apurado porque llegaba tarde al trabajo y afortunadamente solo sufrió lesiones leves y no debió ser hospitalizado.

Por otro lado, esta tarde, en una esquina que ya es clásica a la hora de las colisiones, ocurrió un siniestro en la intersección de la avenida 58 y calle 63.

Allí un Renault 9 color rojo, patente TCT 954 que se movilizaba por la avenida 58 en dirección a la 75 impactó contra un Citroën CR patente OPP 317 que terminó a punto de quedar sobre la vereda.

Si bien tampoco hubo heridos, se vivieron momentos de angustia cuando el conductor del Renault descubrió que en la parte trasera del Citroën iban a bordo un bebé de pocos meses. La conductora, su tía producto del shock por el accidente comenzó a llorar y debieron llamar a la ambulancia  de la UPC para corroborar que la menor se encontraba, afortunadamente en perfecto estado.-