El resultado de la autopsia a Facundo Molares Schoenfeld concluyó que el militante murió producto de una hemorragia pulmonar (cardiopatía dilatada). Se trata del hombre que se descompensó en medio de un operativo policial durante una protesta en el Obelisco. Los peritos destacaron además que “no se observaron lesiones traumáticas”.
En primer lugar, los expertos indicaron que la causa de muerte de Molares ha sido “congestión, edema, hemorragia pulmonar -cardiopatía dilatada-”.
Asimismo, en las consideraciones médico-legales los peritos destacaron que no se observaron lesiones traumáticas con características punzantes, cortantes o penetrante sobre la superficie corporal ni sobre los órganos internos, salvo las mencionadas como injurias médicas en región inguinal derecha; las fracturas costales e infiltrados hemáticos en tórax descriptas, podrían ser compatibles con las maniobras de Reanimación Cardio Pulmonar consignada en la Historia Clínica del Hospital Ramos Mejía.
El informe señala que Molares tenía antecedentes de hipertensión arterial, Insuficiencia Cardiaca, y Pericarditis Constrictiva, según la documentación médica proveniente del Servicio Penitenciario, del Hospital Nacional Alejandro Posadas, y de una internación en el Hospital de Clínica, en la Ciudad de La Paz, Bolivia: “Se desprende que ha padecido sucesivos cuadros de Insuficiencia Cardíaca Congestiva, Insuficiencia Renal Aguda, Hipertensión Pulmonar, hipertensión arterial, Infección respiratoria por COVID-19 y una cardiopatía dilatada en tratamiento”.
TN