Lo aseguró Guillermo Martínez, presidente de Relisa S.A., empresa concesionaria del servicio de recolección domiciliaria de residuos, en una reunión de la Comisión de Infraestructura, Obras y Servicios Públicos del Concejo Deliberante.
El empresario detalló el estado de la negociación con el ejecutivo municipal y consideró que es urgente solucionar esto mediante un convenio porque, según indicó, la empresa está muy complicada en materia económica.
Sobre la deuda, que aseguro que asciende a los $900.000.000, indicó que está compuesta por un juicio por un embargo, por tres o cuatro meses que se deben desde 2015, más intereses por pagos diferidos y deuda de disposición final.
La empresa actualmente ocupa a casi 100 trabajadores, lo que hace una masa salarial mensual de alrededor $28.000.000 aseguró Martínez, quien propone “armar un plan de pagos por los próximos 36 o 48 meses que le sirva al municipio y a la empresa”.
La Comisión espera que el expediente que refleja lo conversado con el empresario sea enviado por el Departamento Ejecutivo para avanzar en el análisis de la situación.
El intendente Arturo Rojas, ya ha aclarado que una de las condiciones para negociar, es que la empresa realice la planta de tratamientos, que está estipulada en el pliego de bases y condiciones.