En medio de la vorágine por el anuncio de Silvina Aída Batakis como reemplazante de Martín Guzmán en el Palacio de Hacienda, algunos internautas comenzaron a buscar información sobre la funcionaria para conocer su trayectoria política hasta el momento. Para ello, recurrieron a Wikipedia, gran herramienta para dilucidar ciertas dudas, pero al hacerlo se sorprendieron con una curiosa advertencia.
“Silvina Batakis (Río Grande, 27 de diciembre de 1968) es una economista argentina, ministra de Economía de la Nación Argentina desde el 3 de julio de 2022, que ocupó el cargo de ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires entre 2011 y 2015, y se desempeñó como secretaria de Provincias del Ministerio del Interior de la Nación Argentina desde diciembre de 2019. Previamente ocupó diversos cargos en la administración bonaerense”, describía la página. Y sobre el final del primer párrafo se leía: “Compren dólares”.
Algún internauta se ocupó de editar el perfil de la flamante ministra y agregar esta pequeña curiosidad.
Las turbulencias cambiarias ya se sintieron en las plataformas de criptomonedas, donde la compraventa es 24/7, pero se espera por la apertura de los mercados este lunes para ver qué consecuencias tendrán las últimas medidas dentro del Gobierno y de qué modo impactarán en la economía de todos los argentinos.
Batakis se desempeñó como ministra de Economía bonaerense en el gabinete de Daniel Scioli, al que arribó de la mano de Alejandro Arlía, que entonces lideraba el grupo de trabajo y militancia “Peronistas sin fronteras”. Actual secretaria de Provincias del Ministerio del Interior que conduce el camporista Eduardo “Wado” de Pedro.
Como ministra de Scioli, le tocó pelear y perder la batalla para que Cristina Kirchner habilitara más fondos a la provincia. Tras la derrota, tuvo que anunciar el desdoblamiento de los aguinaldos mediante un decreto, una medida que, según dijo, la dejó “angustiada”, y que desencadenó una huelga de estatales y docentes que profundizó un conflicto que no parece tener solución a la vista. Como funcionaria de Alberto Fernández y De Pedro, encabezó la batalla para que la ciudad de Buenos Aires no recupere en la Corte Suprema los fondos de la coparticipación que le retrajo la Casa Rosada en 2020.
La mujer que entonces le llevaba los números a Scioli no era política, sino una funcionara técnica que transpiraba la interna feroz entre el exgobernador y la expresidenta. Así y todo, dentro de las tribus del sciolismo siempre fue identificada en el plano más cercano al pensamiento kirchnerista. Su incorporación a la tropa de “Wado” de Pedro, años después, confirmaría esa proximidad.
LA NACION