El 13 de noviembre de 1983 marcó un hito para la ciudad de Necochea con la inauguración del Complejo Turístico Las Cascadas, un espacio que incluía instalaciones recreativas, y la Estación de Piscicultura, ubicada sobre el margen derecho del Río Quequén.
Aquella jornada fue el resultado de años de trabajo y del deseo compartido por la comunidad de poner en valor las bellezas naturales del río y aprovechar sus recursos de manera sustentable.
Hoy, a 42 años de aquel acontecimiento, la Estación de Piscicultura continúa cumpliendo un rol fundamental dentro de la agenda ambiental del municipio, desarrollando un trabajo técnico sostenido y de gran valor para la conservación de la fauna íctica local.
Bajo la coordinación de la técnica en Piscicultura Synthia Zubiaga, el equipo lleva adelante la cría y repoblación del pejerrey, especie emblemática del Río Quequén.
Estas acciones se enmarcan en la gestión de la Dirección de Gestión Ambiental, a cargo de Isabel Génova, dependiente de la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos. Desde allí se impulsa la articulación entre los proyectos de conservación, educación y turismo sustentable, reafirmando el compromiso municipal con la protección del patrimonio natural y la promoción de un uso responsable de los recursos.
La licenciada en Biología Isabel Génova, subrayó que “la Estación de Piscicultura cumple una función esencial dentro del esquema ecológico del Río Quequén. Su tarea principal es la cría y repoblación de pejerrey, un trabajo técnico y biológico que contribuye al equilibrio del ecosistema y a la conservación de nuestras especies nativas”.
Las tareas realizadas en la estación incluyen la formación y mantenimiento de planteles de adultos reproductores, la recolección y cuidado de ovas, el seguimiento del desarrollo de alevinos y las campañas de monitoreo en lagunas y arroyos. Este proceso culmina con la entrega de ejemplares a los clubes de pesca, permitiendo fortalecer el recurso natural y sostener una práctica recreativa tradicional de la zona.
El compromiso y la dedicación del equipo técnico han permitido que la Estación se consolide como un espacio de referencia regional en la reproducción controlada de especies autóctonas y en la educación ambiental, abriendo sus puertas a instituciones educativas, investigadores y vecinos interesados en conocer de cerca el ciclo biológico del pejerrey y la importancia de su conservación.