A tono con la alegría por el triunfo de la copa del mundo después de 36 años, la municipalidad de Necochea amaneció vestida con la enorme bandera celeste y blanca.
El edificio de calle 56, quedó prácticamente tapado por los colores argentinos, como estamos todos un poco hoy, abrazados por nuestra bandera.
Claro que quedó el hueco para la puerta, para poder ingresar, ya que se trabaja en los horarios habituales. No se ha confirmado aún, si al igual que la administración nacional, se decretará asueto para el viernes 23, en vísperas de la fiesta de Navidad.