En una jornada agobiante, con una máxima que a las 15 superaba los 33 grados, el giro repentino del viento hacia el sur, hizo que las playas quedaran vacías ante el clima que se puso fresco.

El Servicio Meteorológico dice que en un rato estarían llegando las lluvias a Necochea y Quequén con un 40 por ciento de probabilidades hasta la noche inclusive.

Para mañana viernes, el viento seguirá del sur y del sudeste lo que hará que el día tenga un clima templado con una máxima de sólo 26 grados, aunque el cielo estará despejado.

Tormenta en la playa

El sábado vuelven las buenas temperaturas con una máxima que podría superar los 30 grados y viento del Noreste.