La será uno de los 20 municipios del país que recibirá un Aporte del Tesoro Nacional (ATN), que en una primera etapa será por valor de 16 millones de pesos.

Así lo anunció este martes el intendente Arturo Rojas, al ofrecer una conferencia de prensa en su despacho, acompañado varios de los integrantes de su equipo de gobierno. Tras subrayar que la situación que atraviesa el municipio no hacía propicio un brindis de fin de año, el jefe comunal anunció un plan de austeridad que incluirá la reducción de su salario (un 20%)y de sus funcionarios (15%), así como de la dieta de los concejales de Nueva Necochea (sugiriendo en este caso que voluntariamente sea también de un 15%).

Rojas subrayó que los gastos superan a los ingresos en el municipio local, situación que adjudicó a un “descalabro” producido por “una pésima administración”, en alusión al gobierno de Facundo López, al que acusó de “falta de previsión” y al que calificó como “nefasto”, asegurando que fue “uno de los peores que ha tenido Necochea” en su historia.

El intendente indicó que los 20 municipios que reciben ayuda de la Nación son los que cuentan con mayores dificultades económico-financieras, destacando que “los 19 restantes tienen retrasos pero ninguno adeuda salarios como es el caso de Necochea”.

Precisó Rojas que el último mes ingresaron al municipio 90 millones de pesos, a los que deben sumarse 10 millones de un aporte del tesoro provincial. Y se gastaron 140 millones, careciéndose de insumos, resmas de papel y combustible”. Esto, dijo, hace que resulte imprescindible contar con aportes extraordinarios.

En el corto plazo el Ejecutivo confía en obtener fondos de coparticipación (aunque se licúe por descuentos), sumado a los 16 millones que lleguen por el ATN, dinero que ingrese a raíz de la moratoria lanzada y el pago anual de tasas por el que optan muchos vecinos al iniciarse el año. “Es una situación compleja”, reconoció.

PLAN DE AUSTERIDAD
Rojas anunció que se hará “un ajuste de la política” en su gestión, en el que el intendente “será el último en cobrar su sueldo”, asegurando que primero lo hará el personal, luego los concejales y más tarde los funcionarios.

Tras señalar que suspende transitoriamente el cobro de su sueldo como intendente, sostuvo que al volver a hacerlo será con un 20% de reducción.

El ajuste incluirá a los funcionarios (15%) y los concejales del oficialismo (15%), invitando a los ediles de otros bloques a sumarse a la medida.

El jefe comunal indicó que de los 65 cargos políticos previstos en el nuevo organigrama municipal, 10 se dejarán sin cubrir. En consecuencia serán 55 los puestos políticos. “Será la mitad de los que tenía el anterior gobierno, que contaba con 110”, precisó.

También aseguró Rojas que “se va a frenar el ingreso de personal”, siendo la excepción el área de salud de necesitarse la cobertura de algún servicio.

“La salud será prioridad”, recalcó. Y agregó que “habrá un control de las horas extras”, precisando que “hubo un despilfarro” en los últimos tiempos, en los que “se repartían como caramelos”.

Sólo se harán horas extras si las autoriza el área de Gobierno, siendo la excepción el área de salud.

OPTIMIZACIÓN DE ESPACIOS
Rojas anticipó que se hará una optimización de espacios por parte del municipio, dejando sin efecto el alquiler de inmuebles en diferentes puntos, incluyendo la casona de Avenida 59 donde hasta ahora funciona la Subsecretaría de Producción, entre otros.

También anunció que se suspenderá la publicidad oficial, aclarando que en el presupuesto oficial la suma contemplada para ese ítem se dispuso en base a lo ejecutado durante el ejercicio anterior, sumándole un 20%. Reveló que ese dinero se destinará a cancelar deudas con diversos medios de comunicación. Aunque aclaró que, en algunos casos, se hará una revisión, dando cuenta de algunos medios prácticamente inexistentes y otros de dudosa procedencia, inclusive foráneos, con los que se firmó contrato durante el anterior gobierno.

El jefe comunal anunció, además, que habrá una reducción de gastos operativos, procurándose ir dejando de lado el papel para privilegiar la digitalización de la administración municipal. “El año pasado se gastaron tres millones de pesos en papel”, subrayó.

Respecto de los numerosos destajistas (trabajadores temporarios), señaló que no se les renovará contrato, destacando que el área de la ex jefatura de gabinete se contaba con personas que no acudían a trabajar y ni siquiera se les conoce el rostro.

“UNA TREGUA”
Rojas manifestó que, llevando 20 días de gestión, aguardaba que hubiera una tregua, fundamentalmente por parte de los médicos, que vienen llevando a cabo un paro. Elogió la decisión del Sindicato de Trabajadores Municipales de reanudar las tareas el próximo jueves. Y anticipó que, de ahora en más, se considerará de manera diferente a quien realiza medidas de fuerza y a quienes continúan trabajando, sugiriendo que se harían descuentos por los días de paro.

El intendente remarcó que, con las medidas de fuerza, el más perjudicado es el vecino, que con angustia padece dificultades sin que se les preste servicios.

“Necesitaría el acompañamiento de los médicos”, insistió, aclarando que no todos los profesionales cesan sus tareas.

“Si no se atiende en consultorio no se factura a las obras sociales y se recauda menos”, añadió.
Rojas confirmó que este jueves será uno de los intendentes a los que recibirá el gobernador Axel Kicillof en La Plata, asegurando que el gobierno provincial cuenta con información de la situación por la que atraviesa Necochea.

En ese sentido, insistió en que “es uno de los peores municipios del país”, en cuanto a lo económico y financiero, reiterando que las demás comunas en crisis “pagan los salarios a los trabajadores”.

RECOLECCIÓN DE RESIDUOS
Por último, acerca de la recolección de residuos, el jefe comunal reconoció que los trabajadores de la empresa privada que presta el servicio sufren las consecuencias del retraso de los pagos del municipio.
Indicó que el último pago que se le efectuó a Relisa fue por un monto de tres millones de pesos, a cuenta de la recolección realizada en el mes de julio.

Acotó que del plan de 60 cuotas acordado por el anterior gobierno con la empresa, en relación con una deuda anterior, no se hizo efectivo el pago de ninguna de ellas.

Tras reconocer que “hay una muy buena predisposición” de los representes de la empresa Relisa para evitar que se interrumpa la prestación del servicio, Rojas también consideró que “no se puede seguir pagando” con el actual esquema de recolección, siendo necesario “cambiar el rumbo” en tal sentido.