La máxima actividad de lluvia de meteoros de las Perseidas, que comenzó el 18 de julio, tendrá lugar hasta el 23 de agosto. Sin embargo, el mejor momento para observarla con más claridad será la noche del 29 al 30 de julio, donde se esperan entre 50 y 100 meteoros por hora. La NASA asegura que se trata del mejor evento de meteoros del año.

Las Perseidas reciben su nombre por la constelación de Perseo, donde se encuentra su radiante, el punto en el cielo del cual parecen nacer. Tienen su origen en el cometa Swift-Tuttle, que fue descubierto en 1862, y que por un tamaño aproximado de 26 kilómetros de diámetro es el mayor objeto que se acerca de forma periódica a la Tierra.

El encuentro más cercano con este cometa se espera que sea para el 15 de septiembre de 4479 y, en caso de que se genere un impacto, la explosión sería 27 veces más fuerte que la del Cometa del Cretáceo- Paleógeno, según la revista Newscientist.

Se conocen como “estrellas fugaces” a las pequeñas partículas de polvo, algunas menores que granos de arena, que se desprenden de los cometas o asteroides a lo largo de sus órbitas alrededor del Sol.

La nube de partículas resultante, meteoroides, producida por el deshielo que genera el calor solar, se dispersa por la órbita del cometa y es atravesada por la Tierra en su recorrido anual alrededor del Sol.

Durante este encuentro las partículas de polvo se desintegran al entrar a gran velocidad en la atmósfera terrestre, creando los conocidos trazos luminosos que reciben el nombre científico de meteoros. Según los cálculos de los modelos estándares, la actividad de las Perseidas se sitúa alrededor de los 100 meteoros/hora.

TN