El movimiento trans-feminista local había convocado a la movilización, que inició a las 17 horas con una concentración frente al Palacio Municipal.
Bajo el lema “Transfeminista, antifascista y antirracista”, la marcha recorrió las principales calles del centro, visibilizando las luchas contra las políticas de ajuste, el hambre, las violencias machistas y las desigualdades sociales y laborales. La movilización tuvo como eje central la defensa de los derechos conquistados y la lucha por la igualdad.
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La marcha contó con una amplia participación de mujeres, lesbianas, travestis, trans, personas no binarias e intersex, así como de diversos movimientos sociales y políticos. Se realizaron intervenciones artísticas, lectura de documentos y discursos que repudiaron las políticas del Gobierno Nacional.
La movilización del 8M de este año tuvo como antecedente la marcha del 1 de febrero, en respuesta al discurso del presidente Javier Milei en el Foro Económico Mundial de Davos, donde rechazó la agenda de género y mujeres, la desigualdad de la mujer en áreas laborales, económicas y sociales y se pronunció en contra de las personas homosexuales.
En este marco, el movimiento feminista y LGTBIQ+ marchó bajo la consigna de una movilización “antifascista, antirracista, antipatriarcal y anticapitalista”, posicionándose en contra del Gobierno y sus políticas sociales y económicas.