La situación de seguridad en nuestra ciudad es compleja.

Esto está claro y no se descubre la pólvora afirmando esta situación, pero siempre es bueno señalarlo de manera que nadie se duerma en los laureles y que se continúen buscando las formas de reducir los hechos delictivos en nuestra ciudad.

En el último tiempo, y estamos hablando de semanas o un mes, son varios los hechos que han sucedido, encima se repiten los modus operandis: robos a comercios céntricos, en mismas zonas, vandalismo y robos en escuelas, en dónde, oh casualidad se llevan las notebooks que después se ofrecen en redes sociales.

Las bicicletas mountain bike son otros de los tesoros que buscan los malvivientes, está claro que deben tener una buena reventa o una rápida salida.

Pero, además de reclamar como siempre la labor tanto de la Policía como de la Justicia para que se prevengan los hechos o en caso de que hayan ocurrido se encuentren a los culpables y se les de la pena correspondiente.

También es necesario ver y analizar en qué condiciones, por ejemplo, se encuentra la fuerza policial para llevar adelante sus tareas de prevención y control en la vía pública. Sabemos, que desde el año pasado hay un número importante de efectivos que fueron dados de baja, alrededor de 40 y que nunca fueron reincorporados.

Hace poco el titular de las políticas de seguridad del municipio, Ángel Vázquez, señaló que se había llevado adelante el pedido de incorporación de nuevos efectivos a la Provincia, por lo cual se esperaba el nombramiento de 30 personas que se sumen a las actuales fuerzas de seguridad en la Departamental de Necochea.

Eso seguramente sería una inyección de energía y dotaría de mayor capacidad y recursos humanos a la policía para continuar cuidándonos a todos.

Pero no sólo nos referimos a eso, sino también es necesario destacar y ver el estado calamitoso que tienen los móviles policiales en nuestro distrito.

Es común ver en las calles a este tipo de vehículos, siempre con algún faltante, Por un lado el paragolpe o que las gomas no están en buen estado, entre otras cuestiones.

Y aquí radica algo importante: primero que con el actual estado de los móviles lo que no se está cuidando es la seguridad de los propios policías y después tampoco pueden velar por la seguridad del resto de los ciudadanos, dado que así como son una invitación a que cualquiera se anime a fugarse. ya que difícilmente la Policía pueda alcanzar a alguien en esos vetustos autos y camionetas.

Seguimos reclamando seguridad pero también es necesario que las fuerzas tengan lo mínimo indispensable para poder garantizarla.