El presidente Alberto Fernández aseguró hoy que el Gobierno “no tiene en carpeta” un aumento de las tarifas de los servicios públicos, y aclaró que esa posibilidad solo “es objeto de estudio y revisión”.
“Que nadie se apure. No sé si en junio vamos a estar en condiciones” de incrementar las tarifas, sostuvo el Jefe de Estado.
Así, Fernández discrepó públicamente con su jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, que en las últimas horas había admitido la posibilidad de que los servicios de luz, gas, agua y transporte vuelvan a sufrir una suba a mitad de año.
Cafiero había dicho que “probablemente” en junio próximo aumentarían las tarifas de servicios públicos, pero aclaró el ajuste sería para “los sectores que lo puedan soportar”.
“Lo que más me preocupa es que algunos pícaros dejen de ganar en detrimento de la gente”, sentenció el presidente, para quien el ajuste tarifario “es actualmente objeto de estudio y revisión para saber quién ganó, cuando ganó y cuánto pagamos los argentinos. Y después veremos lo que hay que hacer”.
“Pero lo primero no es un aumento de tarifas. No tenemos en carpeta el aumento, pero sí tenemos bajo análisis qué pasó para saber exactamente de dónde partir”, dijo Fernández, en declaraciones a la radio AM 750.
Además, señaló que “lo mismo pasa con el transporte: ¿porqué un aumento si están congelados los combustibles”?.
En las últimas horas, el ministro de Transporte, Mario Meoni, había asegurado que está en estudio una posible suba en las tarifas del transporte.
“Va a haber aumentos de tarifas desde mayo pero muy razonables. No van muy por encima de la inflación, no la equiparan, diría. Estamos pensando en un esquema escalonado pero no debería superar el 10 %”, señaló Meoni, cuyas declaraciones fueron rechazadas este viernes por el propio Fernández.
En este marco, el jefe de Estado afirmó que “voy a cuidar el bolsillo de los argentinos hasta el último minuto de mi mandato, porque ese es el compromiso que tomé con la gente. Y lo voy a cumplir”.
“Arrepentidos y testigos privilegiados”
El presidente opinó que son “muy perversos” los mecanismos establecidos en la Justicia para “arrepentidos y testigos privilegiados” y juzgó que “encubren sistemas de explotación de la miseria humana”.
“Todas estas lógicas de arrepentidos y de testigos privilegiados les tengo miedo, siempre he sido bastante reacio a eso, porque en verdad encubren sistemas de explotación de la miseria humana”.
Así lo expresó al ser consultado sobre la derogación que dispuso ayer de un decreto de Macri que había creado la Agencia Nacional de Protección a Testigos e Imputados, firmado pocos días antes de dejar el poder, y la restitución del programa nacional anterior, bajo la órbita del Ministerio de Justicia.
Apuntó que los sistemas para testigos protegidos “proliferaron en algunos lugares del mundo” para combatir el narcotráfico y el terrorismo, pero —dijo— “después lo usaron para cualquier cosa”. (Télam)