Finalizó con éxito una nueva excavación en el sitio Lorda 1, partido de Tandil, coordinada por miembros del Área de Arqueología y Antropología de Necochea, con la participación conjunta de estudiantes de la Tecnicatura Superior en Paleontología del ISFT 194 de Miramar y vecinos de Necochea.
Fueron hallados cientos de artefactos de piedra, acompañados de fragmentos de cerámica y cáscaras de huevo de ñandú. Este sitio arqueológico y sus materiales son de particular interés para estudiar la historia indígena de la Región Pampeana, debido a que se encuentra muy cercano a las canteras indígenas.
Dichas canteras, que se localizan en un lugar muy acotado de las sierras de Tandilia, fueron visitadas por sociedades humanas desde finales de la Era de Hielo (hace 14 mil años), cuando se habita por primera vez este territorio, hasta la llegada de los españoles.
Allí los grupos humanos obtenían una roca con características muy particulares, con la cual confeccionaban la mayor parte de sus instrumentos. Como eran sociedades altamente móviles, en algunos casos esta roca viajó por más de 500 km, lo que resalta el valor que debe haber tenido para estas personas.
Esto implica que los grupos que habitaron la Región Pampeana debieron planificar y organizar largos viajes, y efectuar traslados de rocas muy forzosos, para llevar este recurso a otros sectores de la región.
Por ende, el estudio de los campamentos cercanos a las canteras, como el sitio arqueológico Lorda 1, es muy importante ya que nos brinda evidencias acerca de cómo estos grupos planificaban y se organizaban para viajar hasta las canteras, y también, cómo preparaban las rocas que allí obtenían y que luego trasladarían por cientos de kilómetros, llegando algunas veces hasta regiones vecinas, como el sur de Córdoba, San Luis o el norte de la Patagonia. Los materiales recuperados permanecerán en el Área de Museos de Necochea, en dónde serán analizados.