Con motivo del pase a la Fase 5 de la cuarentena por la pandemia de coronavirus, el municipio monta operativos diurnos y nocturnos en el núcleo urbano, y durante las últimas horas se efectuaron cinco secuestros de vehículos por distintas infracciones a la Ley de Tránsito.
Quien brindó detalles del panorama fue el subsecretario de Ordenamiento Urbano y Fiscalización, Walter Calabretta, quien destacó el trabajo coordinado entre la Dirección de Tránsito, el resto de las áreas que dependen de la Secretaría de Gobierno y la Policía Departamental.
Informó el funcionario que “se dispusieron a partir de las 0 horas los operativos, que es el límite horario que tiene la gente para las reuniones sociales y lugares gastronómicos. Como resultado, si bien se notó en la gente bastante acatamiento en general de las normativas, tuvimos algunos casos que terminaron en secuestros por distintos motivos de violaciones a la Ley de Tránsito”.
En detalle, describió Calabretta que “tuvimos cinco vehículos secuestrados, pero el más destacado fue el una persona que había dado 1.20 de alcohol en sangre. La titular se resistió al secuestro del vehículo de su propiedad y se dirigió con violencia al personal de tránsito y al personal policial, por lo que “terminó aprehendida por las fuerzas de seguridad”.
Los controles de la comuna junto al personal policial seguirán diariamente, aplicando operativos de alcoholemia como también exigiendo a los conductores de vehículos licencia, tarjeta verde y seguro. De hecho, uno de los vehículos secuestrados fue un remís, que circulaba sin el seguro pertinente
En simultáneo a ello, el municipio extrema los operativos de control en los accesos a la ciudad, tanto en el de Ruta 86 como el de Av. 542, continuación de Ruta 88, acerca de lo que Calabretta mencionó que “en los accesos se sigue siendo muy estrictos, se sigue trabajando con todas las áreas como desde el principio, con 24 horas de funcionamiento y con nuevas cámaras de monitoreo”.