Momentos de tensión se vivieron ayer cuando la policía se hizo presente en una vivienda de 81 al 3800 donde un joven de 24 años se encontraba atrincherado en un departamento del fondo del inmueble.
La abuela, de 88 años, les dijo a los efectivos que un vecino de 23 años, había ingresado a la casa dañando el vidrio de la puerta y espejos del living, e intentó agredir a su nieto, que ahora estaba atrincherado en el fondo.
Mientras tanto, la madre del vecino acusado por la octogenaria, manifestó que, antes que llegará la policía, el joven encerrado en el fondo había arrojado una botella de vidrio con combustible y un trapo, hacia su casa.
Los uniformados observan que el señalado tenía en su poder una faca casera y otra botella con las mismas características de las denunciadas por la vecina.
El fiscal José Luis Cipolleti se acercó hasta el lugar para hablar con el joven e intentar hacerlo deponer la actitud.
Después se unas horas, decidió abrir el acceso vivienda y, luego de ser reducido, fue conducido al hospital con fines de practicarle una evaluación médica.
Al término, el médico de policía certificó que tenía lesiones en los miembros inferiores, intoxicación por cocaína, benzodiacepinas y cannabis.
Fue derivado al Neuropsiquiátrico pero allí no lo recibieron por lo que quedó aprehendido en la comisaría primera, otorgándosele posteriormente la libertad en tenor al artículo 161.
En tanto, en el domicilio de su abuela, se secuestró una hoja de cuchillo tipo serrucho y una botella con líquido inflamable.
Foto ilustrativa