El grupo Eslabón Perdido solicitó al titular de la Prefectura Naval de Quequén, Prefecto Principal Marcos Antonio Luffi, que dé intervención a la Justicia Federal en el marco de las actuaciones que lleva adelante esa fuerza por el descubrimiento del casco de un submarino frente a las playas bonaerenses de Costa Bonita y Arenas Verdes.
Por otra parte, se le pidió a la Prefectura Naval Argentina (PNA) que toda actividad que tenga prevista realizar, relacionada a dichos restos náufragos, le debe ser comunicada al grupo descubridor a los efectos de ejercer los derechos que, por esa condición, le otorga la ley.
En ese sentido, se solicitó que se permita a los peritos del grupo formar parte de eventuales expediciones que prepare la PNA para continuar investigando el naufragio, comunicando con la debida antelación la fecha de las mismas, en particular las planificadas por la jefatura de Salvamento y Buceo que, sin comunicarlo, inspeccionó el pecio durante el mes de junio.
Al respecto, Eslabón Perdido ha solicitado que se le informe acerca de la “la planificación de tareas relacionadas a la investigación del naufragio, extracción de muestras y análisis de las mismas permitiendo la respectiva constatación”.
En la nota elevada a la PNA, se indicó que “dicha fuerza se abstenga de realizar toda actividad relacionada al naufragio de referencia sin adoptar los recaudos y previsiones antes mencionados que hacen a los derechos que la legislación otorga al descubridor del pecio de referencia, en particular el artículo 390 y sus concordantes de la Ley de Navegación N° 20.094”.
Finalmente Eslabón Perdido informó que ha ofrecido a la PNA la posibilidad de realizar un trabajo de estudio conjunto de los restos náufragos poniendo a disposición de la policía marítima a los peritos de parte, argentinos y extranjeros, que elaboraron los dictámenes en los que se indica que se han encontrado piezas compatibles a un submarino.
En particular, el informe pericial del doctor Fabio Bisciotti, titular del Gruppo Studi Subacquei de la Liga Navale Italiana, quien, junto a su equipo, están predispuestos a viajar al país para realizar una investigación minuciosa que permita determinar a qué modelo pertenece el submarino encontrado a 28 metros de profundidad y a 4 kilómetros de la costa, cerca del puerto de bonaerense de Quequén.
La semana pasada Eslabón Perdido solicitó al gobierno alemán que informe si reconoce como propio o no el sumergible cuya ubicación era absolutamente desconocida hasta el momento de su descubrimiento en aguas del Mar Argentino.